La Acequia Real del Júcar riega cultivos de una veintena de municipios de la Ribera y l´Horta, pero transporta además todo un legado cultural con más de 750 años de historia. A lo largo del canal se localiza un patrimonio arquitectónico que se pretende aprovechar para dar forma y contenido a la denominada «Ruta de l´Aigua», una propuesta que quiere explotar el potencial cultural y paisajístico del canal que tradicionalmente ha distribuido las aguas para habilitar un itinerario para senderistas, corredores o ciclistas que discurriría a lo largo de los 54 kilómetros que separan l´Assut de Antella, donde nace la Acequia Real, de Alcàsser, donde concluye, pasando por Gavarda, Alberic, Massalavés, l´Alcúdia, Guadassuar, Alzira, Algemesí, Alginet, Benifaió o Almussafes.

El Ayuntamiento de Guadassuar fue el primero que, hace ahora un año, asumió como propia esta iniciativa que lanzó la Acequia Real del Xúquer en 2014, coincidiendo con el 750 aniversario, y que tras un goteo de adhesiones está a la espera de obtener financiación para poder habilitar este carril peatonal que discurriría por la vía de servicio en paralelo al canal.

La propuesta de la Acequia Real contempla inicialmente una actuación sencilla para habilitar este trazado peatonal, pero destaca que a lo largo de este singular itinerario existe una gran cantidad de patrimonio hidráulico que se podría rehabilitar para añadir de forma progresiva nuevos atractivos a este trazado lúdico y cultural. El anteproyecto elaborado por la acequia y la Fundació Assut también dibuja a lo largo del recorrido conexiones de la «Ruta de l´Aigua» con los diferentes núcleos urbanos junto a los que discurre, si bien éstas correspondería realizarlas a los ayuntamientos.

El origen de la Acequia Real, l´Assut de ntella, es posiblemente el paraje más emblemático, pero no el único espacio singular vinculado a la misma, y el anteproyecto de actuación contempla tres lugares de descanso menos conocidos como son la casa de guarda de Alberic; el «cano» de Guadassuar, un conducto subterráneo construido para salvar por debajo el cauce del río Magro o «riu sec», lo que permitió prolongar la acequia y regar también tierras de Algemesí, y un tercero en la «fesa» del Romaní.

«Está el azud, pero también hay derramadores que ahora no tienen uso, fesas, las casas de los guardas típicas de la arquitectura rural y, sobre todo, los molinos que hay a lo largo de la acequia que aprovechaban la fuerza motriz del agua», comenta el secretario general de la Acequia Real del Júcar, Juan Valero de Palma, mientras destaca que esta «Ruta de l´Aigua» permitirá conectar el Xúquer con la Albufera y contribuiría a ampliar la red verde que se está diseñando «al conectar el área metropolitana de València con el Júcar».

La memoria elaboraba subraya que este itinerario peatonal entre Antella y la zona minada de Alcàsser se concibe con un triple objetivo: generar un pasillo basado en la Acequia Real con sus conexiones a los municipios más próximos para el disfrute de los vecinos; divulgar el valor de esta infraestructura y su paisaje para contribuir a la conservación de este patrimonio y facilitar la protección de la red en alta de la acequia al limitar el paso de vehículos pesados por la vía de servicio.

Assut d´AntellaOrigen de la Acequia Real

El azud y la casa de las compuertas que regulan el paso de las aguas del Xúquer a la Acequia Real. La casa original fue construida en 1732, aunque la actual es una reconstrucción ya que las inundaciones de 1982 arrasaron la infraestructura.

Cano de GuadassuarUn paso por debajo del Magro

Conducto subterráneo construido en el siglo XV para cruzar por debajo el cauce del Magro y permitir que las aguas de la acequia regaran también campos de Algemesí.

L´AlcúdiaNorias y molinos

La noria de l´Alcúdia es un claro ejemplo del patrimonio hidráulico vinculado a la Acequia Real del Xúquer.