M. J. Mascarell, Pego

El Sindicato de Empleados Públicos (SEP) con Andrea Zorita como portavoz y los dos delegados de Pedreguer y Pego, Mari Jiménez y Salvador Vicens, denunciaron ayer la precariedad laboral que sufren los trabajadores de FCC en la comarca y acusaron a la empresa que ofrece el servicio de limpieza y recogida de basura de llevar a cabo un "fraude masivo" a ayuntamientos, empleados y ciudadanos. Algunos trabajadores de FCC acudieron a la rueda de prensa celebrada ayer para contar de viva voz situaciones "de explotación y maltrato". Por eso, el SEP anunció ayer que entablará una negociación con FCC para alcanzar un acuerdo y firmar un convenio colectivo comarcal que signifique mejorar las condiciones laborales de los empleados. De lo contrario, "denunciaremos uno por uno todos los pliegos de condiciones firmados con los ayuntamientos que están siendo vulnerados" y, además, el sindicato avanzó "una huelga indefinida para julio si no se llega a un consenso". Cabe apuntar que las poblaciones afectadas en la Marina Alta serían El Verger, Els Poblets, Pego, Pedreguer, Ondara y Orba.

Andrea Zorita aseguró que los empleados "acumulan ya 200 horas extra trabajadas en lo que va de año cuando la ley marca un máximo de 80". Ante esta situación, la empresa "paga las horas extra (8,50 euros) hasta lo máximo que permite la normativa y, luego, las colocan como un plus dentro de la nómina, sujeto a retenciones y, al final, acabamos cobrando lo mismo todos los meses aunque trabajes más". Además, el SEP habló de nóminas, en algunos casos, que no superan los 550 euros, es decir, el salario mínimo interprofesional.

Otra de las denuncias sindicales es que, cuando llega el verano, "hay operarios que trabajan 4 meses seguidos, 120 días sin descanso" y, de esta manera, se cubren las vacaciones de la plantilla sin necesidad de contratar refuerzos.

En cuanto a seguridad laboral se refiere, Zorita afirmó que los camiones que recogen la basura en Pego tienen más de 30 años y, en algunos casos, "carecen de luces de freno o de sensores en la marcha atrás". Los trabajadores aseguraron que piden pedir guantes y mascarillas y "no nos las niegan pero puede pasar un mes hasta que te dan el material".

Sin identidad ante el temor a que la empresa emprenda represalias contra ellos -según los trabajadores ya las están sufriendo con sanciones y suspensiones de empleo y sueldo por sindicarse- desvelaron asuntos como que determinados empleados que deben trabajar sólo en un municipio como el de El Verger también lo hacen en Els Poblets. De hecho, el portavoz del SEP aseguró que "compartir" a nivel comarcal a los empleados "vulnera los pliegos de condiciones" e instó a los consistorios que cuentan con el servicio de FCC a "ser valientes y rescindir esos contratos".

Otro caso es el de la barredora que tiene Pego. El SEP afirmó que el encargado la pone en marcha a las 7 horas y la apaga al final de la mañana aunque eso sí, "no sale de la nave industrial". Después, "la factura de kilometraje se pasa al Ayuntamiento de Pego para que abone a la empresa el gasto de combustible". En esta línea, también denunciaron que FCC "factura a un consistorio unos litros de gasolina que se usan para hacer recorridos por toda la comarca".