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El Arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, presidió ayer, por primera vez, el acto de apertura del curso en la Universidad Católica de Valencia de la que él es el Gran Canciller y aprovechó la ceremonia para anunciar que promoverá entre los jóvenes valencianos encuentros nocturnos el primer vienes de cada mes.
En un salón de actos abarrotado y con la presencia, entre otros, del conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, -el vicepresidente del Consell, Juan Cotino, escusó a última hora la invitación- y el rector de la Cardenal Herrera-CEU, Jose Alberto Parejo Gámir, el rector de la Universidad Católica, José Alfredo Peris, se " refirió al "reto" de la adaptación de los estudios a Europa
"Más que un revulsivo, supone hacer de todos lo que, en un principio, sólo trabajaban unos pocos" y recordó que "las referencias de este nuevo modelo educativo ya estaban en las aula" de esta universidad que ya tiene 9.698 alumnos.
En su opinión, "se abre un tiempo de cambio para los centros universitarios, que se deben convertir en escuelas de modernidad y apostar por el futuro". Alfredo Peris advirtió de que "se verán a profesores que antes de acometer la reforma opten por jubilarse, o que puede haber personas que crean que las universidades se vayan a sustituir por centros de formación rápida y efectista. Pero esto está llamado al fracaso, porque la sociedad necesita del aporte de la Universidad".
Además, afirmó que los profesores "distanciados de los alumnos y las clases magistrales y los exámenes como único método están llamados a decir adiós" porque "vienen nuevos métodos de actuación para transmitir conocimientos a las nuevas generaciones".
Font de Mora también se refirió "al importante ejercicio de responsabilidad que está realizando la Universidad Católica en el proceso de adaptación de sus titulaciones" a Europa.
