Mercedes Casanella abraza a su hijo. Hoy puede decir con toda la ley de su parte que el pequeño es su hijo biológico, con el que acaba de reunirse después de 4 meses separados.

Su hijo fue confundido con otro bebé en el hospital donde nacieron y hasta hace unos días Mercedes ha estado cuidando de un bebé que no era el suyo.

La lucha de Mercedes por recuperar a su bebé comenzó a los pocos días de nacer los pequeños. Ella, casada con un británico enseguida se dio cuenta de que el bebé que tenía en sus brazos tenía la piel demasiado oscura. Desde entonces comenzó una lucha en los tribunales para conseguir una prueba de ADN que demostró que el bebé no era su hijo.

Mercedes ha querido contar su historia para evitar nuevos casos como el suyo.

Desgraciadamente, como explicaba el abogado de la familia estas situaciones se dan demasiado a menudo en El Salvador.