El impacto económico y social del maratón de Valencia, que tantas buenas noticias dejó el pasado domingo en su 35ª edición, llega mucho más allá de la semana de la carrera. Tiene una incidencia directa, durante todo el año, en la Comunitat Valenciana, con especial importancia en la ciudad de Valencia. Así lo atestigua el presidente de la asociación que agrupa a los centros deportivos de las tres provincias, Juan Carlos Gómez-Pantoja. Los gimnasios han visto incrementada la cifra de clientes que se dan de alta con el objetivo, casi exclusivo, de prepararse para correr. Ha nacido una nueva «tribu» de deportistas en las salas de musculación, que compaginan, con mucho sentido común, el trabajo en las máquinas con el aeróbico.

«Muchísimos gimnasios de la Comunitat tienen su sección de ´running´ con el incremento de grandes aficionados a las carreras populares. Son usuarios regulares, de todo el año, porque para participar en carreras hay que tener una masa muscular trabajada y eso se hace con las pesas», explica Gómez Pantoja. «Es algo que ya sabemos desde hace tiempo: para que las lesiones respeten al corredor, debe tonificar los músculos, con entrenamientos específicos. Es clave y fundamental tanto para iniciados como para los que se preparan el maratón», añade el presidente de los centros deportivos, director-gerente a su vez del centro Atalanta, uno de los más arraigados en Valencia.

La idea de entrenar a cuenta y riesgo, con planes sólo centrados en la carrera, va quedando atrás en el mundo de los corredores. Sí, correr en solitario con un plan es en muchos casos un sinónimo de éxito, pero no ofrece tantas garantías como realizar un trabajo más global. «Cerca de un 10 por ciento de los usuarios de los centros deportivos son de las carreras populares. El objetivo máximo de un corredor es llegar a la media maratón y al maratón y hay que marcarse objetivos que puedas cumplir. Antiguamente los gimnasios se centraban en dar clases dirigidas de todo tipo, y ahora abarca entrenamientos más generales. El del ´runner´ ha sido como consecuencia de la demanda que se ha ido creando. El cuerpo tiene unas limitaciones y si sólo corres, te equivocas», explica Gómez-Pantoja.

«El mismo profesor, el jefe de sala de ´fitness´, es licenciado en Educación Física. Es la persona indicada para hacer planes de entrenamiento individualizados, dependiendo de las exigencias de cada uno», añade. La recuperación que ofrecen los centros deportivos es otro punto que hay que tener en cuenta. El «spa» es un elemento esencial hoy en el entrenamiento del corredor. «Los contrastes de agua fría y caliente ayudan a reparar las microrroturas musculares que se producen al correr», afirma.

La globalización del entrenamiento llega al cuidado médico, fundamental para afrontar las carreras con las mayores garantías posibles. «En muchos centros tenemos la atención médica (club medical), con mediciones que sirven para detectar el histórico del deportista y el estado de su corazón», añade. Un control que permite al propio deportista conocer sus limitaciones y como progresar, así como estar «cardioprotegido». Ha razones de sobra para que la «tribu» de corredores vaya en aumento.