Hay una frase del ensayista Vicente Verdú en su diario, en la que dice que hay una sensación de que la inmoralidad no tiene castigo. No es una sensación, sino una evidente realidad.
En el caso Pallarols, a los políticos inculpados no entrarán en prisión previo acuerdo con la Justicia y la devolución de del dinero robado. No hace falta ser un lince para ver que a Undargarin le darán un trato similar, con una simbólica devolución. Al señor Rato le darán el mismo trato por lo que ha hecho con Bankia, pero no devolverá el dinero y demás ya lo han premiado con un puesto en la cofradía de donde despidieron al yerno del rey.
¿Cómo puede haber ese trato para ellos y al que roba cobre para poder comer lo meten incondicionalmente en prisión? Indignante.
