En Levante-EMV del 20 de diciembre pasado leo un artículo (?) de Antonio Vergara titulado «´Uppercut´ contra el presidente del Gobierno» y constato, con estupor, que resulta difícil escribir tantas sandeces una detrás de otra. Y que se haga en un diario serio como Levante-EMV me resulta incomprensible. El pasado 22 de noviembre publicó otro artículo titulado «El Cabanyal se niega a olvidar», lleno de estúpidas majaderías, según hice constar en otra carta publicada el 30 de noviembre, preguntándoles a ustedes si no había nadie en ese diario que revisase tales artículos con tantas puras y duras tonterías sin sentido (a salvo la libertad de expresión por supuesto).

Como el susodicho Antonio Vergara reincide en sus majaderías y estupideces, me permito otra vez acudir a Levante-EMV porque de lo escrito por Vergara se desprende que el auténtico facha, en el sentido despectivo del apelativo, es él mismo. Es de sentido común que un periodista jamás debe atreverse a escribir sobre aquello de lo que forma parte (facherío en este caso) pues pierde absolutamente la necesaria ecuanimidad.

Soy liberal por convicción y respeto cualquier ideología. Pero quienes tienen fácil acceso a la prensa escrita deben tener mucho cuidado cuando expresan sus particulares puntos de vista, en este caso nefastos y malintencionados. Y más si lo hacen en un medio serio e imparcial como Levante-EMV y el mismo día que unas importantes e inciertas elecciones legislativas. Que el asunto no es baladí. Señor director, elija mejor a sus colaboradores. Los lectores de Levante-EMV siempre esperamos leer lo mejor y el escrito de Vergara es «peor imposible». Lorenzo Crespo Andrés. Valencia.