Vamos hombre, como no vamos a llorar con lo que sufrimos y padecemos día a día. Que un númoro insignificante de personas „en relación a la población„ que hemos puestos en el Gobierno para dirigirnos no esté haciendo pasar por el aro es algo más que vergonzoso. Yo y muchos como yo lo llamaríamos por su verdadero nombre, aunque nos pese: cobardía. Ese es el calificativo que tiene esta situación. Si de vez en cuando el pueblo dijera unánimemente «no votamos más», estos señores se lo pensarías dos veces. Enrique San Valero. Valencia.