No es posible que pasando por donde estamos pasando durante décadas este pueblo, se quiera o no , bravo por naturaleza, esté aguantando con los brazos cruzados todo lo que cuatro seres nos están infringiendo cada día. ¿ Acaso es posible que la sangre española no sea ya más que pura horchata?

Sin mover un dedo permitir un paro de millones de personas, una infancia empobrecida cada día más con sus familiares por esta situación al borde del colapso. Unos pensionistas años y años atrás en su bienestar y además teniendo que ayudar a sus descendientes en paro, una sanidad anticuada en la que se ha llegado al extremo de que en un hospital ha habido el caso de una enfermera al cuidado de 27 enfermos y por tal estrés cogió un estado de ansiedad que pudo haber producido algún daño de los enfermos a su cargo€

Unos personajes puestos al mando por ese mismo pueblo al que, sin miramiento alguno, roban a mansalva y que nada ni nadie pone entre rejas ¡ es algo abominable! ¿Dónde, con tantos casos, vamos a parar el día menos pensado? Sólo Dios lo sabe€. O el diablo. Enrique San Valero. Valencia.