Es incomprensible la clase de políticos que tenemos: nos fijamos en un gurpo y a la corta o a la larga nos salen rana. Damos un giro y nos vamos a otro grupo y tenemos que salir de él pitando. Vamos a tener un tercer grupo y antes de que den siquiera una razón ya los hemos calado. ¿Qué tenemos que hacer? ¿Callar? ¡Vamos, no! Eso es lo que quieren. Tenemos que poner las peras a los cuartos. Hacerles comprender de una vez para siempre que España no es ningún juguete de nadie, que quien manda es el pueblo que no va a tolerar ya nunca más los juegos que se llevan los políticos para medrar. Y entonces libertaremos a nuestro país de tanta gente sin conciencia que lo único que quiere es su propio bienestar a costa de su prójimo. Quiero una España diferente, honrada y trabajadora, para que mis hijos y los hijos de mis hijos un día estén orgullosos de unos padres que supieron luchar para dejarles en herencia una tierra libre y próspera. Inés de Haro Climent. Valencia