El pasado 3 de octubre se publicó en este periódico que «Hacienda revisará los valores catastrales de 183 municipios de la Comunidad Valenciana». Hace dos años hice una reclamación en la Dirección General del Catastro en Valencia, precisamente por un exceso de valoración que al final se resolvió en mi favor. En una de las entrevistas que mantuve, el funcionario que me atendió, hablando de cobros sobre las valoraciones catastrales, me explicó que existía una abanico respecto al cobro y que cada ayuntamiento lo aplicaba según sus criterios dentro de esa horquilla.

Como ejemplo me comentó que el ayuntamiento de Alaquás y otro de la Ribera Baja, que no aparece en la relación, estaban aplicando casi el mismo cobro. Le comenté si le parecía normal y me contestó que legal lo era, si bien injusto.

En aquel momento me quedé con la copla y al ver el artículo me he acordado de ello. Si esto es así y como veo que en dicha población se revisó el catastro en 2010, observo que les corre mucha prisa. Han pasado poco más de los cinco años. Es indigno que cobrando de esta forma este municipio solicite de nuevo la revisión si no lo es para aplicarlo a la baja como los de Paterna y Aldaia.

Considero que esto debería ser conocido por los vecinos de la localidad, como me gustaría a mí si me afectara, pues todos somos vecinos de algún municipio y podemos estar sometidos a estos excesos. Antonio García. Alaquás.