Cada vez más la gente se queja de que si la corrupción por un lado, la corrupción por el otro, pero en realidad hay que darse cuenta de que los juicios que hacemos a las personas, las cosas que les atribuimos sin saber y lo que decimos en contra, no sirven de mucho. Hay que darse cuenta de que nuestras quejas no van a hacer una sociedad de gente honrada, una sociedad perfecta.

Parece que la gente solo piensa en sí misma, y muchas veces lo que nos hace sentirnos bien es pensar en el de al lado, que para eso es para lo que estamos, para servir. No es justo, que porque yo piense una cosa, no pueda ayudar o hacerme amigo de alguien que piensa justo lo contrario, y nos tenemos que dar cuenta de que si queremos cambiar lo que hay ha de ser, como diría el "Cholo Simeone: «partido a partido», como si fuese el último de nuestras vidas.

Así que, si queremos cambiar esta sociedad ha de ser unidos, en una sola piña, y no quejándonos del que tenemos al lado por lo mal que lo hace, sino corrigiéndole. Nacho Sanchis García. Valencia.