Paradojas de la vida. Muy bonito, atractivo y sabio este programa de televisión, que no tengo por qué criticar, cuando el día 27 de noviembre se premia a un concursante por sus aciertos: 25.000 euros, grata alegría. Pero (siempre hay un pero)... ¿qué pensará la gente que está falta de empleo al ver cómo personas inteligentes se llevan cantidades astronómicas y sobre sus cabezas, por ejemplo, pende no poder pagar la hipoteca ya que han perdido sus empleos? Situaciones éstas que, por una razón, dan y por la otra quitan. ¿A dónde vamos? Enrique Sanvalero. Valencia.