Nunca en la historia ha sido tan fácil influir en la sociedad como ahora. Cosas tan sencillas como un tuit bien escrito, o una carta al director de un periódico puede hacer que cambie la opinión de mucha gente, hasta el punto de invertir el curso de unas elecciones o recibir el apoyo de gente suficiente como para que no se apruebe una ley. Esto no pueden hacerlo solo personas con una gran influencia, sino cualquier persona, mayor de edad o no. Por ello animo a todo el mundo a tratar de apoyar causas justas y hacer lo posible por mejorar esta sociedad con el poder que tenemos. Santiago Ortiz Monserrate . Valencia.