El pasado lunes se produjo un atenytado en Manchester. Ocurrió durante la emisión en 13TV del programa El cascabel, que presenta Antonio Jiménez, quien se despachó en los siguientes términos: «¿El Manchester Arena no tendrá que ver con los dos equipos de la ciudad, el United y el City?». A lo que respondió un contertulio que había cosas más importantes que el fútbol.

No debió gustarle la respuesta, pues respondió que el fútbol era más importante y el Real Madrid, todavía más. Lo que demuestra una total falta de sensibilidad y empatía hacia las víctimas. Quiero pensar que pretendió calmar los ánimos ante tan desgraciada noticia con algo parecido a un chiste de muy mal gusto, pero no fue así; se equivocó por completo.

Ante semejante comportamiento, y usando el mismo argumentario de la derecha de este país, ¿no debería alguien denunciarlo ante la fiscalía por un delito de menosprecio a las víctimas y otro de atentado a su dignidad? Sería deseable, cuando no imperativo, que la Conferencia Episcopal -de la que depende esta emisora- tomara cartas en el asunto y pusiera en su sitio a este señor; es decir, en la cola del paro. ¡Ah, no! Claro, en este caso se han malinterpretado sus palabras o se han sacado de contexto€ y lo llamarán libertad de expresión" Vaya, vaya. Óscar Campos Caudé. València.