Las cosas de palacio van despacio, reza un conocido refrán español. Ana Echeverría, hermana de Ignacio, recientemente asesinado en Londres, ha reconocido la labor de las autoridades británicas y ha afirmado que no comparte comentarios que han salido en la prensa respecto a la torpeza en su actuación. Asegura que han hecho todo lo posible para ayudar a su familia, y su hermano Enrique también se ha mostrado satisfecho con las explicaciones que les ha dado el juez.

Me parece un ejemplo de paciencia, comprensión y respeto con el modo de proceder del prójimo, en este caso, las autoridades británicas. Cada maestrillo tiene su librillo, dice otro refrán.

En cualquier otro caso, los familiares de la víctima ya habrían linchado a los responsables de la tardanza en identificar el cuerpo, esgrimiendo motivos de incompetencia, desorganización, ocultamiento de la verdad y mil y una causas más, con tal de imponer su derecho a «conocer la verdad, ya y por encima de cualquier cosa», aunque fuera el cadáver de su propio hermano. José María Ferreira. València.