Xavier Manzanet, Vila-real
Vila-real inició ayer el desalojo de la segunda planta de la casa consistorial, conocida como la de la alcaldía, para poder iniciar las obras de ampliación del salón de plenos en el que, a partir de la próxima legislatura, se tendrán que acomodar 25 concejales, cuatro más que en la actualidad. A día de ayer, 24 de junio, los vila-realenses eran más de 52.000. El aumento en el número de habitantes y, por tanto, en el número de electores hará necesario que el consistorio pase a tener 25 concejales en lugar de los 21 actuales y a crear nuevos escaños en el salón de plenos. Aunque no hay confirmación oficial, todo apunta a que lo trabajos empezarán el 1 de julio.
Las obras afectarán al propio despacho del alcalde, secretarías, prensa, sala de comisiones y salón de plenos "y esperemos que estén terminadas para las fiestas patronales de septiembre", han comentado a Levante de Castelló el alcalde, Juan José Rubert, y el portavoz del equipo de gobierno, Ignasi Clausell. El actual salón de plenos quedará prolongado hasta absorber el salón de comisiones, también se producirán algunos cambios en el propio despacho del alcalde y sus aledaños, el salón noble quedará dispuesto de otro modo y, la intención del equipo de gobierno es hacer una sala de prensa más capaz.
Toda la planta actual de la alcaldía, con todos los servicios y el salón de plenos, ocuparán, ya la próxima semana, las dependencias de la llamada Casa dels Mundina, edificio de propiedad municipal ubicado en la calle Major Sant Jaume y en ese punto permanecerán hasta los primeros días de septiembre o puede que hasta unos días después de las celebraciones patronales de la Mare de Déu de Gràcia.
En opinión de muchos vecinos hubiera valido la pena que, aprovechando las obras de mejora que se realizan en la plaza Major se hubiera procedido a derribar el actual ayuntamiento para buscarle nueva ubicación pero "al final, todo tiene que ver con las disponibilidades económicas" como en más de una ocasión comentó el alcalde anterior, Manuel Vilanova, y su sucesor, Juan José Rubert.
Y es que la planta baja del actual edificio alberga servicios varios entre los que figura la Jefatura de la Policía Local que cuenta en la actualidad con 110 agentes. En las plantas superiores, hasta siete, se encuentran los departamentos de obras, oficinas y diversos despachos.
El actual alcalde es partidario de trasladar la Policía Local a lo que fue cuartel de la Guardia Civil aunque es evidente que la remodelación y la rehabilitación, afirman quienes lo saben, resultará más cara que el derribo y la construcción de un edificio de nueva planta. En cambio, el grupo socialista opina que el actual cuartel podría servir para entidades vecinales y culturales y también hay quien dice que la Policía Local podría ocupar las instalaciones de la comisaría del Cuerpo Nacional cuando los agentes pasen a ocupar la nueva comisaría.
Se inauguró en los años 70
El Ayuntamiento de Vila-real lo inauguró el Ministro de Gobernación, Tomás Garicano Goñi, en tiempos de Franco, allá por los años sesenta. Entonces, la ciudad rozaba los 30.000 habitantes.
