S. Pitarch/J. Ruiz, Castelló
Los ayuntamientos de Cabanes y Orpesa exigieron ayer a la Conselleria de Infraestucturas que desbloquee la segunda fase de las obras de la carretera que debería unir ambos municipios y que fue proyectada hace 13 años. El polémico vial, que atraviesa el Desert de les Palmes y que debe unir el litoral con el interior castellonense, se encuentra a medio hacer, puesto que sólo se han ejecutado 6,7 kilómetros que fueron inaugurados en 2006 y que costaron 22 millones de euros.
"Me parece muy mal que el proyecto esté paralizado. La carretera creó mucha ilusión y expectación en Cabanes y nos llevó a impulsar un polígono industrial. Ahora seguimos como siempre", explicó el alcalde de Cabanes, Artemio Siurana. El concejal de Urbanismo de Orpesa, Tomás Fabregat, también lamentó la paralización del proyecto y aseguró que les había perjudicado mucho. "Una CV-148 en condiciones es una comunicación fundamental para Orpesa ya que debe dar servicio a las 100.000 personas que residen en el municipio durante el verano", explicó.
Ambos responsables políticos criticaron duramente a la conselleria por el bloqueo de las obras. Siurana aseguró que "no me han dicho nada de las obras. Es todo muy extraño". Por su parte, Fabregat afirmó que los políticos "están para solucionar problemas y no para aparcarlos", refiriéndose al tramo que falta por ejecutar y que debe atravesar el Desert de les Palmes.
En la actualidad
En estos momentos, desde Orpesa a Cabanes hay 6,7 kilómetros de carretera en perfecto estado y de repente, según aseguraron ambos representantes municipales, "se pasa a un pedregal". Al mismo tiempo, 20 kilómetros más al norte de la polémica carretera, la misma conselleria construye un nuevo vial similar al que se proyectó entre Orpesa y Cabanes que unirá el aeropuerto de Castelló con Torreblanca, es decir, el interior con la costa. Esta nueva carretera deberá estar finalizada para cuando se inaugure el aeródromo de la provincia. Respecto a la CV-148, nada se sabe, y lo que es más importante, sólo hay previstos 250.000 euros de los 23 millones que cuesta el vial.
