El titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Castelló tomó declaración ayer, en calidad de testigos, a la directora del colegio Vicente Artero y a dos profesores más por el caso del maestro acusado de pederastia en este centro escolar.

La directora, I. F., aseguró ayer que el juez se interesó por "aspectos generales" de la relación que el acusado mantenía con el personal del centro y con sus alumnos. "Yo no lo conocía personalmente, ni a él ni su tendencia, si es que la tenía. Es decir que no lo conocía ni como profesional ni como persona. Todo esto ha sido una sorpresa para todos", aseguró tras la declaración.

El profesor acusado de un delito de pederastia, que responde a las iniciales R.F.O., tenía en su poder una cámara fotográfica en la que llegó a almacenar, supuestamente, hasta 3.000 imágenes de niños. La Policía lo detuvo a principios del pasado mes de febrero tras las denuncias de algunas madres de niños que sufrieron los supuestos abusos.

Juicios paralelos

"Lo que no creo que sea de recibo es que la prensa saque fotografías del centro y de los profesores que allí trabajan, porque los juicios paralelos entorpecen la investigación. Como comprenderá, si es culpable yo no tengo ningún interés en salvarlo", aseguró la directora del colegio.

La responsable del Vicente Artero añadió que en el colegio "se sigue trabajando con tranquilidad y normalidad" y consideró que "este tinglado lo ha montando una minoría".

R.F.O se incorporó en 2005 al Sanchis Yago procedente del CEIP Antonio Armelles. La Conselleria de Educación le obligó a pedir el traslado tras presentar contra él una queja la asociación de padres y madres del Antonio Armelles. Obtuvo una plaza provisional para Primaria por comisión de servicios (puesto provisional), tal como constata la resolución definitiva de adjudicaciones de dicho curso, a la que ha tenido acceso este diario.