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Los inspectores de Hacienda adscritos a la Fiscalía Anticorrupción han detectado que Carlos Fabra y su mujer, María Amparo Fernández, no han podido justificar el origen de los fondos con los que adquirieron al menos 4 propiedades inmobiliarias de las 30 que entre 1999 y 2004 figuraron a nombre de la pareja en Castelló, Alicante, Madrid e Ibiza. Según los peritos, "no consta en las cuentas bancarias transferencias o disposiciones de fondos (reintegros o cheques)" que pudieran corresponder con los pagos por la adquisición de estos inmuebles.

Así, el matrimonio Fabra no ha podido justificar el "origen de los fondos" con los que adquirió una serie de propiedades: la parcela número 44 de la urbanización La Coma; otra parcela en la urbanización Torre Bellver; unos terrenos en Les Platgetes; y un tercer piso en la plaza las Salesas de Madrid que costó un millón de euros.

Además, según los técnicos de la Fiscalía, Fernández dejó de declarar al fisco una de las dos parcelas de la urbanización La Coma que vendió en el año 2002, por lo que los peritos insisten en que "procede incrementar la base imponible en 8.385,90 euros".

Fabra y su mujer aparecen como titulares al 50 por ciento de 9 bienes inmuebles, entre parcelas y viviendas.

El matrimonio adquirió por compraventa la parcela 3 de la Urbanización La Coma (Borriol) y la vivienda en la Plaza Salesas de Madrid.

A su vez, los Fabra adquirieron por dación en pago otras 6 parcelas en Borriol y mediante traspaso un piso en la calle Gasset de Madrid, tal como aparece reflejado en el informe patrimonial que obra ya en manos del juez Jacobo Pin, el instructor del caso Fabra.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Castelló aparece como titular único de tres inmuebles: una vivienda en la calle Doctor Agut de Culla, una parcela en La Coma (ambas adquiridas por compraventa) y otro piso en la calle Asensi de Castelló.

El listado de bienes inmuebles urbanos de María Amparo Fernández, como titular única y en diferentes participaciones, es aún más extenso, y recoge al menos 18 propiedades, entre ellas dos parcelas en La Coma (la número 85 y la número 86); dos viviendas y un garaje en Benicàssim; otro piso en Alcoi; 3 edificios industriales en la misma ciudad alicantina; una vivienda en Terrazas de Botafoch (Ibiza); una parcela en Torre Bellver (Orpesa del Mar); y otros tres locales en Alcoi, además de un solar. Por otra parte, Fernández dispone de dos fincas rústicas en Vall d'Alba y un muelle de amarre en Orpesa. La mujer de Fabra fue adquiriendo estas propiedades a lo largo del tiempo mediante compraventas, segregaciones, propiedades horizontales y herencias.

En el año 2004, el presidente de la Diputación de Castelló detalló ante notario la relación de bienes de su familia para entregarla a la prensa. En la declaración mencionó el piso en Ibiza a nombre de su mujer y de su suegra, pero olvidó otras propiedades de su esposa a medias con su familia. Entre ellas, el amarre en Orpesa, el apartamento en Benicàssim y una participación en las dos fincas industriales de Alcoi.

Además, la familia Fabra-Fernández dispone de una residencia habitual valorada en más de 120 millones de las antiguas pesetas, que ocupa una superficie de 400 metros cuadrados en Pozuelo de Alarcón (que pasa por ser una de las zonas de viviendas unifamiliares más caras de la provincia de Madrid).

Carlos Fabra y María Amparo Fernández figuran como imputados en un delito contra la Administración Pública. El líder del PP está imputado, además, por fraude fiscal, al haber dejado de ingresar en su IRPF una cuota próxima al millón de euros.