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Los grupos de la oposición de la Vall d'Uixó, PSPV y EU, han criticado la drástica eliminación de plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida llevada a cabo por el equipo de gobierno. Según informaba ayer Levante de Castelló, de 500 plazas reservadas que había, sólo se han aceptado 20 solicitudes de reserva en propiedad en la puerta de casa, y se han creado otras 58 plazas genéricas repartidas por todo el municipio, lo que reduce el total de plazas reservadas a 78 en toda la ciudad, una cifra que desde estos partidos ven "insuficiente".

Esquerra Unida ha denunciado que le han llegado quejas de algunos afectados a los que se les ha denegado la plaza de aparcamiento y que realmente sí la necesitan. Por ejemplo, el edil de EU, Nicolás Monago, ha señalado el caso de una persona que va con muletas, que ha sufrido siete operaciones de columna y que vive en una zona con muchas cuestas donde es difícil aparcar. "A esta persona le han denegado la plaza alegando que no reunía los requisitos necesarios, cuando le cuesta caminar más de 50 metros". Monago está de acuerdo en que era "necesario hacer una revisión para regular estas plazas, pero da la sensación de que no han hecho el más mínimo estudio para hacer las cosas bien".

En este sentido, EU ha solicitado a la Comisión Informativa de Interior un listado de las personas a las que se les han denegado y los criterios que se han tenido en cuenta, información que todavía no les ha sido facilitada. Según Monago, "creemos que lo lógico sería dar a las personas con movilidad reducida las máximas facilidades posibles, porque eliminar alguna de sus plazas de aparcamiento no resuelve ningún problema, pero a ellos les complica las cosas, pero da toda la impresión de que para el PP las personas con movilidad reducida son un número y nada más".

"Demasiado restrictivos"

Por su parte, para el concejal socialista, Benjamín Salvador, con esta eliminación masiva de plazas de aparcamiento especiales las personas con movilidad reducida "están pagando los platos rotos por la decisión del PP de cargarse 600 plazas de aparcamiento libre en superficie con la instalación de la ORA". Según Benjamín Salvador esta regulación de las plazas de aparcamiento para minusválidos debería haberse hecho "siguiendo unos criterios muy selectivos, con el propósito de no perjudicar a nadie y no meter a casi todo el mundo en el mismo saco porque han sido muy selectivos y restrictivos a la hora de conceder estas reservas".