Una oleada de robos ha asolado a ayuntamientos de pequeños municipios de Castelló en las dos últimas semanas y ha puesto en jaque a la Guardia Civil. Los alcaldes reclaman un endurecimiento de las penas para los ladrones reincidentes.

Han sido ocho casas consistoriales de localidades con escasa población del interior de la provincia las que han sufrido asaltos de una banda organizada. Los capos se han cebado en ayuntamientos a pesar del insignificante botín encontrado en cada uno de ellos. En total han obtenido unos 4.000 euros. Poco mas. La Guardia Civil sospecha de que los autores pertenecen a un mismo grupo y ha extremado la vigilancia en la zona con el afán de capturar a los protagonistas. De momento no hay detenidos, aunque se ha localizado un vehículo utilizado en uno de los robos.

La primera víctima fue el ayuntamiento de Càlig, el 17 de septiembre, en el que los ladrones se apoderaron de 600 euros. Tres días después el tocó el turno a los de Cabanes, Vilafamés y Vilanova. En el primero sólo sustrajeron 90 euros y dos cámaras de fotografías, en Vilafamés cerca de 20 euros mientras en Vilanova se fueron de vacío. Una semana después, se desplazaron al norte de la provincia y en una misma noche accedían a las casas consistoriales de Xert, Catí y la Jana. Y de las tres también se llevaron poca cosa. De Xert 100 euros, una televisión y un DVD; de Catí 200 euros, una televisión, un equipo de música y un DVD, y de la Jana únicamente 15 euros.

Y hace pocos días usurparon 3.000 euros en el ayuntamiento de Espadilla.

También sufrió una oleada de hurtos en septiembre agricultores y ganaderos de la provincia. Ahora parece que la presión delictiva se ha mitigado en el campo. "Teníamos una queja al día", señaló el secretario provincial de la Unió de Llauradors, Vicent Goterris. Los cacos se apoderaron sobre todo cable de cobre, maquinaria y ganado.

Ante esta profusión de robos, alcaldes y agricultores, además de reclamar una mayor vigilancia en la zona a la Subdelegación del Control, han pedido un endurecimiento del Código Penal para los reincidentes. "Cuando los cogen salen enseguida a la calle al ser un robo menor", apuntaba la alcaldesa de Vilafamés, Luisa Oliver. "Si una persona reincide se la debería aplicar medidas más duras", añadió, por su parte, el primer edil de Cabanes, Artemio Siurana. Y es que la mayoría de los arrestados vuelve a actuar tras ser liberados provocando un quebradero de cabeza a la Guardia Civil.