Los reiterados mensajes del ministro Blanco, garantizando que el AVE a Castelló no se retrasa, parecen haber amansado el espíritu guerrero del alcalde de la ciudad. Los compromisos del titular de Fomento han desactivado o, al menos, mitigado la "rebelión cívica" auspiciada por Alberto Fabra, quien ayer mostró un talante conciliador, a pocos días de la reunión que mantendrá con el ministro la semana que viene.

El primer edil había convocado ayer a los parlamentarios nacionales del PSOE y PP de la provincia para trazar una postura común de cara a la reunión que mantendrá Fabra con el ministro la semana que viene. Pero la reunión quedó desvirtuada por las declaraciones de Blanco del día anterior en el Senado, en las que reiteró que el AVE a Castelló se licitará a lo argo de 2011 -con la fórmula público-privada- y será una realidad en 2014, como estaba previsto.

Así que el alcalde dedicó buena parte de su intervención a criticar al PSOE por no haber acudido a la convocatoria. "Lamento que no estén todos aquí. Tendrán que justificar por qué han defraudado a los ciudadanos de Castelló", señaló. Fabra podría haber extendido el reproche a los parlamentarios de su partido. Sólo acudió a la reunión uno de los tres diputados de Castelló: ni el número uno Juan Costa ni la dos Andrea Fabra estuvieron presentes y sólo se personó Miguel Barrachina. De los cuatro senadores, acudieron tres: Juan José Ortiz, Araceli Peris y Alfonso Ferrada, mientras que Manuel Altava no estuvo.

Cuando este diario preguntó al alcalde si lamentaba también la ausencia de sus compañeros de partido, justificó que éstos "ya habían anunciado que no podían venir".

Alberto Fabra mostró su disposición a "colaborar" con Fomento para que el AVE llegue en las fechas previstas. Por su parte, el senador Juan José Ortiz mostró sus dudas sobre los plazos: "Mucho me temo que los trámites serán más largos de lo que deseamos y que el AVE no estará en 2014".

El subdelegado del Gobierno en Castelló, Antonio Lorenzo, manifestó "desconocer" la razón de la campaña de Alberto Fabra, pues "sabe que va a llegar en los plazos previstos, tal como reiteró en el Senado el ministro de Fomento, José Blanco".

La "gran mentira" del alcalde

Y el senador del PSOE Joan Baptiste Cardona y las diputadas Antonia García y Susana Ros pidieron al alcalde de la ciudad "que no intente montar una gran mentira sobre el AVE para camuflar que en diciembre se podrá ir de Castelló a Madrid en menos de tres horas". Los tres justificaron que no acudieron a la llamada del alcalde porque se iba a reivindicar un compromiso respecto al AVE "que ya ha adquirido sobradamente el propio ministro José Blanco".

El alcalde de Castelló, Alberto Fabra, se mostró ayer crítico con el modo en que el ministro de Fomento, José Blanco, ha hecho públicas las negociaciones de su departamento con Aumar para rescatar el tramo de la AP-7 Castelló-Orpesa: a través del secretario general del PSPV en la provincia, Francesc Colomer.

El primer edil recordó que los ayuntamientos de los municipios afectados, el Ministerio y la Conselleria de Infraestructuras constituyeron una comisión sobre la polémica variante de la N-340 y la alternativa de la AP-7. "Me gustaría que se hubiera informado a todas las partes. Es preocupante que el Ministerio haga pública su decisión a través del secretario general del PSPV en la provincia".

Colomer desveló a este diario que Fomento ya negocia con la empresa Aumar, concesionaria de la AP-7, el rescate del tramo de autopista comprendido entre Castelló y Orpesa. La semana pasada, el dirigente socialista aprovechó el viaje de José Blanco a Valencia para mantener un encuentro privado con él. En la reunión se abordó la situación de las infraestructuras pendientes en la provincia, entre ellas, la polémica variante de la N-340.

Según el líder del PSPV en la provincia, el ministro le trasladó que su departamento está en negociaciones con Aumar para proceder al rescate del tramo de la AP-7, una medida alternativa al desdoblamiento de la nacional. Sobre la N-340, Colomer aseveró que deja de ser una prioridad, ya que que la fluidez de las comunicaciones quedaría garantizada con la liberalización del tramo de la AP-7, la ejecución de la autovía A-7 (o CV-10) que discurre por el interior y el eje directo Castelló-Benicàssim.

Un estudio de la Universitat Jaume I (UJI) cifró en 130 millones de euros el rescate del tramo de 20 kilómetros de AP-7 entre Castelló y Orpesa.