El equipo de gobierno de Castelló sacó adelante en el pleno de ayer la subida de un 1,9% en los impuestos y tasas municipales de 2011, con la oposición del PSPV y Bloc, y culpó de ello al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Con el regreso a la bancada popular del concejal y presidente de la diputación, Carlos Fabra, tras siete meses de ausencia por enfermedad, el PP aprobó, con sus únicos votos, las nuevas ordenanzas fiscales del próximo ejercicio, que incluyen un alza del IPC interanual de julio en tres impuestos (IBI, plusvalías e IAE), diez tasas (vado, circulación, matrimonio, exámenes de oposición y retirada de vehículos, entre otras) y cinco precios públicos de servicios municipales. El concejal del PSPV Juli Domingo vaticinó que el PP iba a responsabilizar a Zapatero del incremento fiscal, y así fue. Un envalentonado concejal de Economía, Juan José Pérez Macián, achacó la revisión fiscal a "los desmanes" del Ejecutivo central.
El edil popular, que repitió, según Domingo, hasta 19 veces el nombre de Zapatero, afirmó que sólo se ha actualizado el Índice de Precios de Consumo e indicó que el único que sube impuestos es el reiterado Zapatero."Nosotros aumentamos los impuestos 9,5 euros frente a los 600 euros del Gobierno", espetó. Para aportar estas cifras, el concejal del PP sumó únicamente dos impuestos en la parte municipal (IBI y basuras), mientras en el lado de Gobierno recogió los incrementos del IVA, luz, gas, gasolina y hasta la cesta de la compra. También criticó la congelación de las pensiones y el recorte salarial de los funcionarios, y cargó contra el portavoz socialista, Juan María Calles, por su "silencio" en el pleno de ayer.
"Sólo quieren recaudar"
El concejal socialista Juli Domingo acusó al PP de querer "sólo recaudar y culpar al Gobierno", "es lo único que saber hacer y explican". A su juicio, el ayuntamiento "no es responsable de la crisis, pero es responsable de dar la espalda a los ciudadanos, porque no ha aportado un euro para abordar políticas para salir de la crisis y ni un sólo azulejo". Recordó que el IBI ha crecido un 78% en la última década, lamentó que el equipo de Alberto Fabra realiza únicamente políticas de caridad en Bienestar Social y defendió un recorte en gastos de promoción, cuyo coste, dijo, equivale a la recaudación que se obtendrá con el incremento fiscal (1,4 millones de euros).
Por su parte, el portavoz del Bloc, Enric Nomdedéu, añadió que esta subida del IPC habría sido razonable si en los años anteriores el ayuntamiento hubiera llevado a cabo la misma política. Pero en 2009 y 2010 "los ciudadanos pagaron un 5,6% más por encima de IPC", y en opinión de Nomdedéu, este exceso debería ser asumido en 2011 por el ejecutivo local.
En su réplica, Pérez Macián obvió mencionar el aumento fiscal de los últimos años e insistió en responsabilizar a Rodríguez Zapatero de las nuevas ordenanzas del próximo ejercicio. El regidor defendió el trabajo del área de Bienestar Social, calificó el gasto en promoción institucional de necesario "para garantizar que la verdad llegue a los ciudadanos ante las mentiras de la oposición", y negó los gastos de ediles en comidas denunciados por la oposición. "Ninguno ha comido en Cuenca lo que se dice que se ha comido", dijo.
Y para rematar, comparó los viajes al extranjero de ediles de Castelló con el de la ministra de Exteriores para defender, apuntó, "la dictadura de Cuba".
