A falta de aviones, Carlos Fabra y Francisco Camps se pusieron el uno al otro por las nubes y patrimonializaron la inauguración del aeropuerto de Castelló, que sigue sin fecha de apertura. Fabra convirtió el acto en un autohomenaje de despedida y justificó que la infraestructura se estrena antes de que entre en funcionamiento para que los ciudadanos puedan visitarla y pasear por la pista en el próximo mes y medio, o sea, de aquí a las elecciones.

Los presidentes autonómico y provincial fueron los protagonistas de un evento que congregó a cerca de 1.500 personas, que se desplazaron en autobuses fletados por una veintena de ayuntamientos. También acudió una amplia representación de miembros del gobierno valenciano, diputados autonómicos y provinciales, alcaldes y concejales, así como empresarios y representantes de diversos estamentos.

Camps y Fabra cortaron la cinta, descubrieron una placa y subieron al escenario. El presidente de la diputación, que abrió los discursos, dio a la jornada de ayer trascendencia histórica: "Supone la refundación de esta provincia. Ha llegado la hora de Castelló. El día en que el sector turístico provincial despegó para siempre. Una fecha que recordaréis todos los que estáis aquí y vuestros hijos y sus descendientes...".

Fabra afirmó que el aeropuerto es el hito del siglo XXI en la provincia y lo equiparó a la construcción del Puerto de Castelló en el siglo XIX y la creación de la UJI en el XX.

El mandatario provincial admitió las dificultades del proyecto, pero auguró un futuro prometedor, pese a "aquéllos que hicieron todo lo posible para que este día no llegase". Y lanzó una advertencia a Fomento para que agilice la tramitación de los permisos: "Nadie entenderá ni un solo día más de lo necesario para ponerlo en marcha".

Fabra dijo sentirse "feliz, orgulloso y emocionado". Se le entrecortó la palabra cuando se acordó de sus hijos y nietos y de la enfermedad que ha superado. No escatimó elogios hacia el presidente de la Generalitat, Francisco Camps: "En la historia de la democracia, nunca un gobierno valenciano hizo tanto por Castelló. Gracias, jamás lo olvidaremos".

Carlos Fabra explicó por qué inaugura un aeropuerto que no está operativo: "Hay quienes dicen que estamos locos por inaugurar un aeropuerto sin aviones. No han entendido nada del acto. Este es un aeropuerto para las personas.

Durante un mes y medio, cualquier ciudadano podrá visitar esta terminal o caminar por la pista de aterrizaje. Algo que no podrían hacer si fuesen a despegar aviones". Finalmente, aprovechó el acto como despedida política. "Qué mejor escenario para despedirse que un aeropuerto. Formo parte de este sueño colectivo llamado Partido Popular", aseveró, dando un tinte partidista a un evento institucional.

Por su parte, Camps destacó que la inauguración supone "la culminación de un sueño, de una manera de ser y de entender el futuro". El presidente de la Generalitat calificó a Fabra de "visionario" y "autor intelectual de este proyecto".

"Has sufrido mucho, pero ha valido la pena. Este aeropuerto ha tenido que solventar todo tipo de problemas y por eso es el mejor". Camps dijo sentirse "feliz" al finalizar esta legislatura "y esperando muchas más". Y sentenció: "Castelló está en lo más alto de la historia de España".