El nuevo Reglamento de Espectáculos Taurinos garantizará la supervivencia de las plazas de toros singulares o históricas de la Comunitat Valenciana, que podrán plantear excepciones a la normativa estatal por sus peculiaridades.

Así lo aseguró ayer el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, tras presentar a los expertos del mundo del toro las novedades más destacadas de la normativa que está preparando su departamento para adaptar a la Comunitat el marco legal nacional.

Según ha avanzado a empresarios, ganaderos, veterinarios y profesionales taurinos -Vicente Barrera entre ellos-, el Reglamento de Espectáculos Taurinos garantizará la supervivencia de determinados aspectos "propiamente valencianos".

En concreto, regulará las características específicas de las plazas de toros históricas que "por sus peculiaridades no se adaptan a las medidas estándar del resto", y que podrán plantear una excepción al cumplimiento de los requisitos establecidos "siempre que se justifique técnica y documentalmente la imposibilidad de su adopción".

En la Comunitat, presentan peculiaridades históricas plazas como las de Algemesí y Bocairent (Valencia); las de Castelló, Vinaròs, Vilafranca, Morella, Onda, Benassal, Orpesa y la Vall d'Alba (Castelló); y la de Monóvar, Elda y Ondara (Alicante).

Como novedad, el conseller ha destacado que "se abre el abanico de personas que pueden ostentar la presidencia de un espectáculo taurino", un cargo que podrá ocupar "toda persona con aptitud". En materia de asistencia sanitaria, en las plazas y recintos taurinos será obligatoria la existencia de un servicio sanitario, con la posibilidad de suspender el espectáculo si no se cumple este requisito. La nueva normativa introduce la prohibición expresa de la venta o reventa encubierta, y un nuevo procedimiento de autorización de espectáculos taurinos.