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El agravamiento de la crisis financiera internacional ha recrudecido las dificultades en el tejido productivo de Castelló. Cerca de 700 firmas provinciales dejaron de cotizar en agosto y septiembre de la Seguridad Social, mientras de enero a agosto 6.143 trabajadores se han visto inmersos en expedientes de regulación de empleo, según datos publicados por el Ministerio de Trabajo.

El repunte de la primera mitad de año se ha quedado en un espejismo y Castelló, al igual que el resto de España y Europa, vuelve a estancarse. La economía parecía que en el primer semestre de 2011 empezaba a estabilizarse y las empresas castellonenses registraron un leve despegue empujadas por exportaciones y la campaña turística después de tres años de caída en picado. De abril a julio bajó el desempleo y la cifra de negocios volvió a crecer de forma tímida. Sin embargo, llegó agosto y la amenaza de impago de una endeudada Grecia acrecentó los miedos en los mercados internacionales y regresó la incertidumbre al sector financiero, lo que ha provocado de nuevo un empeoramiento de la ya de por sí alicaída economía provincial.

Los problemas de las entidades bancarias y los recortes públicos han vuelto a debilitar el tejido productivo de Castelló. En sólo dos meses se han borrado de la Seguridad Social 688 empresas de Castelló. Al cierre de septiembre, la cifra de mercantiles inscritas en la Seguridad Social había bajado de nuevo de las 18.000 (17.887), una cifra que supone que el tejido productivo ha vuelto a números de 2003. Son ya cuatro años de crisis económica y en este tiempo Castelló ha perdido 3.774 firmas, el 17% del total.

Por su parte, las empresas han promovido en los primeros ocho meses de 2011 expedientes de regulación de empleo que afectan a 6.143 trabajadores, de los que la mayoría son temporales, ya que 1.040 forman parte de EREs extinción. Los sindicatos señalan que a partir de septiembre han vuelto a proliferar los expedientes de regulación y contabilizan 40 más que en 2010. Por su parte, el desempleo roza los 60.000 parados en Castelló después de crecer en cerca de 2.500 personas en agosto y septiembre, una aumento que rompió la tendencia a la baja de abril a julio.

Ajustes y problemas financieros

Los sindicatos de CC OO y UGT achacan este nuevo retroceso a los recortes en la inversión pública auspiciados por los estados europeos, mientras la patronal provincial considera que se debe a la retracción de los países de la EU como consecuencia de la incertidumbre existentes en el sector financiero. "Cuando hay restricción en salarios y recortes en inversión pública se provoca una desaceleración económica que tiene su efecto en las empresas y en el empleo", indicó la secretaria general de Comisiones Obreras en las Comarcas del Norte, Encarna Barragán, quien planteó la puesta en marcha de un plan de empleo y formación, demandó un impulso del sector de la construcción en un "nivel adecuado" y el regreso de la liquidez crediticia a empresas y familias.

El secretario general de UGT Plana Alta-Maestrat-Els Ports, Tino Calero, también responsabilizó a los medidas de ajuste de la UE de los problemas económicos y advirtió que el segundo semestre de año "será peor que el primero".