La consellera de Infraestructuras y Medio Ambiente, Isabel Bonig, recordó ayer durante la entrevista con los alcaldes que el plan especial del marjal dará cobertura a las viviendas legalmente construidas o consolidadas pero no a aquellas que estén de forma ilegal. "Los ciudadanos quieren que se cumpla la legalidad, y todo aquello que sea legal se llevará a cabo, y lo que no, no se le dará cobertura", aseguró tajante la consellera. "Hay una solución legal que conviene a todas las partes", añadió.

Así se refirió Bonig a la situación de las viviendas que se construyeron en la zona protegida entre 2003 y 2007, y que están afectadas por el Catálogo de Zonas Húmedas del 2002, y la Ley Urbanística Valenciana (LUV) en 2005. "Todos los casos no tienen solución", aseguró la consellera aunque sin nombrar directamente al medio centenar de expedientes de derribo que pesan ya sobre otras tantas construcciones de Nules.

El Plan Especial sí que dará cobertura a las viviendas que se construyeron antes de la salida de estas normativas, y que los vecinos desconocían a la hora de construir en la zona húmeda. El plan va a tener un "estricto cumplimiento de la legalidad, preservando los valores de la zona protegida", destacó Bonig. En este sentido, el primer edil de Nules reconoció que "se han cometido delitos flagrantes que no podrán tener protección".

"Vamos a realizar un estudio de aquellas construcciones que sean compatibles con los valores ambientales y culturales asociados a ese espacio, en especial para el mantenimiento de la actividad agrícola, cumpliendo en todos los caso la legislación vigente en la materia", destacó la consellera.

Alcantarillado contra los vertidos

Junto a ello, Bonig aseguró que el Plan Especial será compatible con el Plan de Reducción del Impacto Territorial de las Viviendas de la Marjaleria, que prepara el Ayuntamiento de Burriana y que pretende reducir el impacto ambiental de las viviendas consolidadas en la zona húmeda, y "se circunscribe únicamente a aquellas construidas con anterioridad a la catalogación de la zona como protegida". Calpe destacó que con este plan "se pretende dotar de un alcantarillado a las viviendas que actualmente están realizando sus vertidos a pozos que pueden contaminar el marjal; de modo que preservamos así los valores medioambientales a la vez que mejoramos los servicios de estos núcleos residenciales consolidados", concluye Calpe.