El Ayuntamiento de Onda cambiará este año la reglamentación para otorgar las ayudas sociales. Al contrario de lo que estaba establecido hasta ahora, los destinatarios deberán realizar, para obtener las ayudas, contraprestaciones en las diferentes actividades y servicios que ofrece el consistorio. Así, el propósito que persigue el equipo de gobierno es "dignificar" estas ayudas, que dejarán de ser "pasivas" y "aumentar la cohesión social", ya que el solicitante o el miembro de la unidad familiar que corresponda deberá implicarse en el sector público.

Tan sólo se exceptuarán de este supuesto los beneficiarios que padezcan "deterioro físico o psíquico grave, acreditado mediante el informe médico correspondiente, siempre que hayan tramitado la correspondiente solicitud de reconocimiento de minusvalía", según advirtieron desde el equipo de gobierno.

"Las ayudas dejarán de ser pasivas y pasarán a dignificarse al realizar a cambio una contraprestación social que ayude a cohesionar aún más a todos los ondenses", explicó Inmaculada Alós, teniente de alcalde de Atención Social.

En el ámbito municipal

El ayuntamiento ofrecerá un amplio abanico de posibilidades de colaboración social en el ámbito municipal y que estarán relacionadas con las actividades que se realizan en el Casal Jove, en l'Escola d'Estiu, en el SAT, en el servicio de Teleasistencia a casa, en la agencia Amics, en los talleres que organiza el ayuntamiento, en las actividades que organizan las asociaciones vecinales o en las de las entidades sin ánimo de lucro, en eventos municipales o relacionados con el urbanismo o el medio ambiente.

Con esta iniciativa, el equipo de gobierno también pretende integrar a aquellas personas que están en el umbral de la exclusión social y que a través del voluntariado pueden encontrar una vía más para su integración.

De llevar adelante esta iniciativa, el consistorio de Onda sería el primero de la provincia en pedir a los beneficiarios de ayudas sociales en el ámbito municipal su colaboración a cambio del cobro de los subsidios. Faltará por concretar, ahora, qué tipo de colaboraciones podrán hacerse efectivas y cuántas personas tendrán que facilitar su colaboración para poder cobrar las ayudas. El gobierno tampoco ha especificado qué pasaría si los beneficiarios se niegan o no cumplen con el cometido asignado.