Lo que muchos temían que podía ocurrir, ha sucedido: Fernando Miralles se plantea desde las últimas semanas la posibilidad de abandonar el Club Deportivo Castellón. La aparición de nuevas facturas, de las que ni Antonio Blasco ni José Manuel García Osuna le habían informado, ha disparado peligrosamente la deuda hasta los seis millones de euros, según las estimaciones del empresario de Figueroles, que se siente completamente engañado por Castellnou SL.

A pesar de que Miralles lleva meses intentando aliviar la grave situación económica del Castellón, lo cierto es que cada paso hacia adelante se convierte en dos hacia atrás. El pago a un acreedor abre las puertas a otros, que surgen de repente y sin previo aviso. Castellnou obvió muchas cosas en su huida, eliminando documentación en las oficinas de Castalia. Que el lunes la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) notificara la existencia de cuatro denuncias de exjugadores albinegros por un importe total de 60.000 euros no es una casualidad, como tampoco que ahora el extécnico Jordi Vinyals solicite ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) más del doble de lo que había reclamado inicialmente por la liquidación pendiente tras su despido en octubre de 2010.

"Si sé hace cuatro meses que la situación es ésta, ni loco doy el paso de entrar en el Castellón", admite Miralles. "En estas últimas semanas se me ha pasado varias veces por la cabeza devolver el club a Castellnou", añade.

El empresario de Figueroles no oculta que "me siento solo", advierte. "Sólo encuentro zancadillas y es muy complicado sacar esto adelante. Se hace realmente pesado", prosigue.

Al respecto, advierte que "hay mucha gente que presume de albinegrismo, pero a la hora de la verdad no echa un cable".

El dirigente del Castellón va más allá y señala directamente al ayuntamiento y la diputación. "Llamo a las instituciones y no hay manera de que me reciban o me hagan caso", lamenta.

Miralles es consciente de que para recibir el apoyo público -entiéndase subvenciones- necesita disipar las dudas sobre Castellnou con una junta extraordinaria y ordinaria de accionistas. Por eso, desvela que mantiene contacto directo con Blasco y Osuna desde hace semanas. "Hablo con ellos y me dicen que aguante, que en breve darán el paso hacia adelante y Castellnou convocará la junta", subraya.

Con todo, a pesar de las continuas trabas, Miralles conserva la ilusión por reflotar al Castellón. "De momento me encuentro con fuerzas, aunque necesito más colaboración de todos", concluye.