El colegio católico concertado Nuestra Señora de la Consolación ha pasado a las familias de cada alumno un cobro adicional "voluntario" de 30 euros mensuales para compensar la demora en los pagos de la Generalitat Valenciana, según consta en una circular remitida a los padres de los alumnos matriculados. El centro no sólo no ha pedido permiso a los padres antes de decidir este nuevo cobro, sino que además les ha puesto en la tesitura de tener que comunicar antes del día 4 de febrero "si alguno no estáis de acuerdo con que se os pase dicha cantidad por el banco". La dirección del colegio explica a sus clientes que La Consolación no cobraba de la Generalitat desde junio de 2011 y que la deuda ascendía a 177.000 euros.

Además, la escuela asegura no confiar en las promesas de la Generalitat. "Hemos sobrevivido solicitando ayuda a la Congregación, y adeudando buena parte de las obras de mantenimiento y reparaciones de verano para poder pagar las nóminas al personal. Con todo, es mucho el tiempo transcurrido esperando que cumplieran sus promesas y la situación en este momento es totalmente insostenible". Asimismo, la carta alega que el pago parcial realizado ayer por la conselleria "aliviará algo la situación, pero no la soluciona".

Respecto al cobro "voluntario", el sindicato UGT advirtió que la ley prohíbe que los centros concertados cobren a sus alumnos, dado que la Generalitat ya le paga teóricamente por ese coste "y no deberían tenerse en cuenta las donaciones para adjudicar plazas".