"Que los políticos empiecen a tocarse los sueldos pero ya. Cuando lo hagan y den ejemplo, nosotros nos callaremos". Esta era una de las frases que más se podía oir ayer en la acuñada Manifestación del Despilfarro que congregó a más de cinco mil manifestantes en el aeropuerto de Castelló -según la organización-, y que estaba convocada por los sindicatos de la Unión General de Trabajadores (UGT), Comisiones Obreras (CC OO), la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F), la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE) y la Intersindical. La masiva afluencia hizo que las fuerzas de seguridad prohibieran el paso a más manifestantes por la limitación de aforo, lo que provocó la invasión de la autovía cercana y el corte temporal del tráfico.

La marcha es una acción más de las que se están llevando en la provincia de Castelló para exigir al gobierno de Alberto Fabra que retire el decreto ley del 10 de enero en el que se aprueban los recortes que afectan a los servicios públicos.

La manifestación se celebró en las tres capitales de provincia de la Comunitat Valenciana a modo de peregrinación a los lugares considerados como "despilfarros" del gobierno valenciano. En Valencia fue en el circuito urbano de la Fórmula 1, en Alicante la Ciudad de la Luz y en Castelló el aeropuerto. Hasta allí se desplazaron miles de personas descontentas con las medidas adoptadas por la Generalitat, sobre todo, en educación y sanidad.

Varias profesoras coincidían al asegurar que el Consell debería haber negociado las decisiones que ha tomado "para intentar buscar alternativas". "En todos estos años de bonanza a nosotros no nos han subido el sueldo y ahora tenemos que pagar sus despilfarros y mala gestión. Y lo peor es que estas medidas no solamente afectan al sueldo, también revertirán en la calidad de la educación y asistencia médica", aseguraba otra profesora de Burriana.

Juana y Minerva son enfermeras en los centros de salud de Montanejos y Onda y ya están recibiendo las primeras quejas de los pacientes quienes preguntan por qué no está siempre el mismo médico. Ambas aseguran que con el recorte en sanidad tendrá que asumir el trabajo de otros centros, con lo que aumentará el trabajo y "mermará la calidad asistencial". Además, una de ellas lleva seis años con contrato temporal que le han ido renovando cada seis meses. La última renovación solamente fue de tres meses y tema que ya no le vuelvan a contratar. "Lo más grave es que hemos perdido los derechos que tanto nos ha costado conseguir", añadieron.

Dispositivo de seguridad

También ayer se desplegó un importante dispositivo de seguridad en el aeropuerto de Castelló. Más de doce todoterrenos de la Guardia Civil y un cordón de seguridad de treinta agentes del Grupo de Reserva de Seguridad (CRS) de la benemérita, aguardaban en mitad de la autovía la llegada de los participantes. Además, cortaron los accesos a las instalaciones aeroportuarias y solamente dejaban entrar a sindicalistas y manifestantes, según explicó un agentes. La manifestación, que se prolongó de 11:00 a 13.00 horas, transcurrió sin incidentes.