A falta de seis días para que se cumpla el primer aniversario del robo de la imagen de Cueva Santa, la Guardia Civil continúa investigando las pistas para dar con los ladrones que, durante la madrugada del 19 de mayo de 2011, entraron en las dependencias del Santuario mariano _ubicado en el término municipal de Altura_ y sustrajeron tanto la talla de yeso de la imagen de la Virgen como el relicario que la contenía.
Una investigación que, tal y como confirmaron desde la Benemérita, "sigue abierta" con el fin de averiguar qué fue de la imagen. Tal y como apuntó en su día el ex subdelegado del Gobierno en Castelló, Antonio Lorenzo, los servicios centrales de Guardia Civil, tanto a nivel nacional como internacional, trabajan desde el mismo día del robo con el fin de localizar esta valiosa pieza desde el punto de vista histórico y patrimonial.
Sentimiento y devoción
Y es que, a pesar de que la talla en sí no cuenta con ningún tipo de valor económico, ya que se trata de una representación de la Virgen tallada en yeso, tiene un elevado valor sentimental tanto para el municipio de Altura como para los vecinos de todos los pueblos de la comarca del Alto Palancia que la veneran. De hecho, la noticia del robo de la figura sumió en la tristeza y la indignación a los miles de feligreses que acudían al templo para rezar ante la imagen de la patrona de la diócesis de Segorbe- Castelló.
Pese a que desde la subdelegación de Gobierno que ahora encabeza David Barelles declinaron hacer declaraciones al respecto, según ha confirmado la Guardia Civil las investigaciones continúan. Por este motivo, en este momento "son pocos los datos que se pueden facilitar" acerca de si hay alguna nueva vía de trabajo que haya abierto nuevas esperanzas de recuperar la talla de la Blanca Paloma.
Hipótesis
El modo en que se desarrolló el robo hizo pensar a los agentes en un primer momento que los propios ladrones no estarían interesados en la imagen de la advocación mariana, sino tan solo en el relicario de oro y plata que la contenía para poder venderlo y sacar beneficio económico.
Posteriormente los expertos comenzaron a barajar otras opciones y las pesquisas se centraron en averiguar si la imagen pudo ser sustraída del Santuario para posteriormente ser "colocada en el mercado negro".
Una situación que puso en alerta a los expertos de la Benemérita para intentar buscar, dentro de los principales canales de venta clandestina e incluso fuera de las fronteras españolas esta pieza ante la posibilidad de que pudiera haber sido adquirida por algún coleccionista, principalmente en el extranjero.
Cabe recordar que la imagen robada durante el pasado año es una réplica de la talla original de la Virgen, que databa del siglo XV y desapareció durante la Guerra Civil. Se trata de un bajorrelieve de yeso de 20 centímetros de alto por 10 de ancho que fue elaborado en la década de los años 40 para suplir la imagen auténtica.
Aún así, lo cierto es que a tan solo unos días de que se cumpla un año del robo de la Virgen de la Cueva Santa, la imagen mariana continúa sin aparecer para desazón de los vecinos.
Aunque el pasado 29 de abril en la romería oficial al santuario de Altura se bendijera la nueva imagen de la patrona de la diócesis, que actualmente preside el altar mayor del templo, el deseo de que la Virgen original vuelva a su santuario todavía sigue vivo en los corazones de los miles de devotos que veneran a la Cueva Santa desde todos los rincones del mundo y, en especial, en la comarca del Alto Palancia.
