Los recortes en el sistema sanitario público de salud en Castelló están llegando a límites difícilmente imaginables, como es el caso del Hospital General de Castelló, donde se ha dado la orden de suprimir la comida a las madres que tienen niños ingresados en la planta de pediatría.

Desde hace años este centro sanitario asumía la comida de los acompañantes que permanecen en el hospital para atender a algún menor. Esta decisión se basaba en que se cree que la estancia del menor en el hospital es menos gravosa si los padres están el mayor tiempo posible acompañándole, incluso en los horarios de las comidas. Así, muchos familiares recibían el menú en planta al mismo tiempo que el niño.

A partir de ahora ya no se sirven comidas a familiares en esta planta de pediatría y tendrán que costearse la manutención, puesto que tampoco se les permite llevar alimentos del exterior.

Fuentes de la Conselleria de Sanitat aseguraron ayer que en los hospitales de la Comunitat Valenciana, el menú del acompañante del paciente a cargo de la Administración no es un servicio habitual, sino "extraordinario para determinados casos".

"Concretamente en pediatría, para garantizar que las personas sin recursos o cuyos hijos permanezcan ingresados durante un largo periodo puedan acceder a este servicio, el trabajador social del hospital valora cada caso individualmente y sus necesidades", añaden las citadas fuentes.

La propia Conselleria de Sanitat insiste en que, en todo caso, se trata de una medida extraordinaria.

Desde el sindicato sanitario Satse se recuerda que el personal médico ha puesto en marcha la campaña stop recortes, que se muestra contraria a todo tipo de medida que suponga una merma en la calidad asistencial.

Según Satse, los recortes afectarán directamente a los ciudadanos y pueden incluso incidir en una reducción de camas y de unidades en los hospitales, menos centros de salud, menos profesionales, menor calidad y cantidad de los materiales empleados y más listas de espera.

Mayor ahorro

Entre otras medidas propuestas por el sindicato sanitario, alude a propiciar un mayor ahorro en gasto corriente; la mejora de la gestión de los recursos materiales y tecnológicos; una mayor coordinación entre niveles asistenciales y con el ámbito sociosanitario; una gestión racional de listas de espera y pruebas diagnósticas, o una mayor evaluación de las nuevas tecnologías desde el punto de vista del coste/efectividad.

"También se puede favorecer la atención domiciliaria y la hospitalización a domicilio; impulsar la prevención y educación para la salud en todos los niveles de la asistencia; el control exhaustivo de la facturación a terceros, o revisar los conciertos existentes con el sector privado para mantener los verdaderamente necesarios, entre otras", según el sindicato sanitario Satse.