La Conselleria de Educación cerrará el año sin poder pagar alrededor de 20 millones de euros que adeuda al sector educativo público de la provincia de Castelló, según confirmaron fuentes de la Generalitat. Estos impagos pondrán contra las cuerdas a los 224 centros no universitarios, a las empresas proveedoras y a las familias de los más de 76.000 alumnos de primaria y secundaria en la provincia.

Este extremo fue también recientemente corroborado por el propio conseller de Hacienda, José Manuel Vela, que advirtió que la Generalitat ha dado por cerrado el presupuesto y no tendrá liquidez para pagar sus deudas pendientes hasta 2013.

Por si quedara un atisbo de esperanza, el pleno del Consell de hace dos viernes aprobó un nuevo recorte de 5 millones en educación para Castelló antes del cierre del presupuesto, lo cual reduce aún más las posibilidades de que se efectúen los pagos.

La cifra de 20 millones pendientes es la suma de los abonos incumplidos en becas de comedor, ayudas a comensales y becas de transporte (cerca de 10 millones de euros), becas de libros de secundaria y proyectos de calidad educativa (2 millones de euros), gastos básicos de funcionamiento de los 151 colegios de la provincia (2,7 millones de euros) y gastos básicos de funcionamiento de los 51 institutos de secundaria (5 millones de euros).

A todo ello se le debe sumar otras deudas de subvenciones varias que suman una cifra indeterminada de decenas de miles de euros, según precisaron fuentes de los centros. Uno de los problemas más sangrantes lo atraviesan los comedores escolares, que todavía no han recibido el segundo y el tercer cuatrimestre de becas y ayudas a comensales del curso anterior.

Los portavoces del colectivo de directores de primaria de Castelló manifestaron que los colegios intentarán sostener el servicio hasta Navidades, pero advirtieron que ya hay colegios que arrastran más de 5 meses de facturas pendientes con las empresas proveedoras, que están comenzando a llegar al límite.

La demora en los pagos -que ya se prolonga casi dos años- también se extiende al transporte escolar y a los proyectos de innovación educativa, lo cual está limitando el margen de maniobra de los colegios de la provincia a la hora de ofrecer iniciativas que mejoren la calidad de la formación de los alumnos.

Por su parte, la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Castelló (FAPA Penyagolosa) también ha lamentado que el Gobierno valenciano ha reducido en casi un 40% el número de beneficiarios de las ayudas de comedor, de transporte y de libros al introducir un cambio en los baremos.