Representantes de los artesanos que componen el mercadillo artesanal del Torreón de Benicàssim acudieron ayer pleno para saber en qué situación se encuentra el que ha sido su lugar de trabajo en los últimos 22 años. La alcaldesa, Susana Marqués, les obligó a abandonar la sala después de que mostraran las pancartas reivindicativas. "Éste no es el lugar para tratar este tema", zanjó la responsable municipal.
La concejala Helena Llobell respondió al PSPV que el paseo
de la playa Torre Sant Vicent no acogerá el mercadillo durante las fiestas, como avanzó este periódico, porque, a día de hoy, no tiene una ubicación fijada. "Estamos realizando la búsqueda desde que acabó el verano pasado".
En estos momentos, el Plan de Explotación de Playas que redacta el consistorio benicense y que está condicionado por el Servicio Provincial de Costas no contempla el mercadillo y es por ello que durante la Semana Santa no podrá instalarse.
Las reacciones por parte de los representantes del mercadillo no se hicieron esperar y, aunque tenían preparada una batería de preguntas, después de las palabras de la edil responsable se levantaron, alzaron pancartas y afearon al equipo de gobierno que "no respeta el trabajo de 23 familias". Según lamentaron, esta parte ha ignorado su solicitud de reunión. Hoy y mañana recogerán firmas en el paseo.
Acto seguido, la alcaldesa les pidió que abandonaran la sala sin que tuvieran que intervenir los agentes de la Policía Local personados en la sala. Una vez que se marcharon, Marqués añadió que el 3 de abril se reunirá con ellos.
Por otro lado, el pleno de ayer aprobó la ordenanza sobre la ocupación de la vía pública. Con la votación a favor de PP y Bloc (PSPV y EU se abstuvieron) a partir del 30 de abril entrará en vigor la norma que unificará la imagen turística. Eliminará las marcas publicitarias en el mobiliario de los establecimientos y apostará por un mobiliario urbano homogéneo.
La ordenanza ha sido consensuada con las diferentes asociaciones de restauradores locales.
FIB
Con motivo de la presentación de una moción por parte del grupo socialista relacionada con los festivales de música, la concejala responsable, Carolina San Miguel, pidió a todos los grupos políticos de la oposición "lealtad institucional, prudencia y discreción" sobre el futuro del FIB. La edil defendió el trabajo municipal para buscar una solución a los problemas económicos que atraviesa la empresa organizadora del festival.
