El ADN de los restos del único bebé exhumado en Castelló como presunto niño robado durante el franquismo "coincide con el de sus padres", según confirmó ayer el teniente fiscal de Castelló, Juan Salom.

Salom detalló que las pruebas de ADN demuestran "que no hay indicio de delito alguno, de responsabilidad criminal, porque el bebé está donde la documentación dice que fue enterrado".

El fiscal aclaró que el archivo del caso es provisional, por lo que puede reabrirse "si aparecen indicios nuevos que desvirtúen las pruebas actuales, aunque tendrían que ser indicios de cierta entidad para superar a una prueba de ADN".

La exhumación del cuerpo se realizó en abril del año pasado en el cementerio viejo de Castelló. Según fuentes próximas al caso, el bebé nació en una clínica privada de la capital de la Plana. La causa judicial pretendía investigar si se falseó la documentación porque el bebé podría haber nacido tras nueve meses y tres días de gestación.