El president de la Generalitat, Alberto Fabra, afirmó ayer que infraestructuras ferroviarias como el AVE y el Corredor Mediterráneo son "punta de lanza" para reactivar "definitivamente" la economía. Fabra participó en el acto oficial de inauguración del AVE Madrid-Alicante que, presidido por el príncipe de Asturias, contó también con la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. El jefe del Consell se marcó como próximo reto la llegada del AVE a Castelló en 2015, con la diferencia de que lo hará por la actual plataforma adaptada al ancho europeo, mientras que Valencia y Alicante disponen de una doble vía independiente para la alta velocidad. La conexión entre la capital de la Plana y Madrid quedará reducida a dos horas y cuarto, aunque Castelló será la única de las provincias por donde discurre el corredor mediterráneo en que los trenes no podrán circular a 300 kilómetros por hora, ya que el tope será de 220.
Según el presidente de la Generalitat, "esta realidad" del nuevo AVE permitirá "un mayor crecimiento" y generará "nuevas oportunidades de futuro". Por ello, Fabra, al final de su intervención, emplazó al Gobierno en "la próxima parada de este tren de la competitividad: Castelló 2015".
Tras agradecer al príncipe de Asturias su presencia en esta cita y al presidente del Gobierno por "su compromiso e implicación" en esta infraestructura, el president subrayó que cuando, "desde la unidad y lealtad" se trabaja por el bien común, se abre futuro y prosperidad.
"Toda la sociedad civil, las instituciones públicas y las organizaciones que representan los sectores productivos, hemos reclamado, con fuerza y unidad, subirnos al tren de una nueva era, cargada de ilusiones y futuro", manifestó Fabra.
Este nuevo servicio ferroviario inaugurado ayer tendrá un impacto económico de unos 70 millones de euros al año en el PIB de la provincia alicantina, generará 735 empleos y permitirá impulsar el turismo residencial, de negocio y deportivo. El servicio de este nuevo trayecto de alta velocidad comenzará a prestarse a partir de hoy, con dieciocho frecuencias diarias, nueve por sentido, y una adicional de refuerzo los fines de semana, y la distancia podrá cubrirse, en el mejor de los casos, en dos horas y veinte minutos.
El impacto del AVE
A juicio de Fabra, el AVE inaugurado supone "una mejora excepcional" de la provincia con los principales mercados emisores de turismo al ser una infraestructura, según agregó, "clave" para impulsar el desarrollo turístico y económico de Alicante y la Comunitat. Además, la llegada del AVE a esta provincia propiciará, y así lo remarcó Fabra, que aumente la visita de turistas durante todo el año y se potencie el turismo cultural, gastronómico, deportivo, de negocios o de salud, con los beneficios añadidos para hoteles, restaurantes, comercios y actividades deportivas. También se prevé que el AVE Madrid-Alicante dé un importante impulso al sector inmobiliario de toda la provincia, especialmente segundas residencias.
