El Pleno del Consell ha aprobado sacar a licitación el contrato para la gestión del aeropuerto de Castelló. La oferta contempla la explotación del aeropuerto durante 20 años, en los que se limitará a 25 millones el desembolso que hará la administración valenciana para poner en marcha la polémica infraestructura. En este sentido, esa inversión máxima estará condicionada al número de pasajeros y limitada a un máximo de 4,5 millones al año. Sobre el número de pasajeros que condicionará las aportaciones desde las arcas de Generalitat, la empresa adjudicataria dejará de recibir dinero en el momento en que se alcancen los 360.000 pasajeros, momento en el que el Consell estima que el aeropuerto será rentable para la empresa adjudicataria.

Aerocas, la empresa pública responsable, se reunirá esta misma tarde para aprobar el pliego de condiciones y poner en marcha el proceso para externalizar la explotación del aeropuerto antes de final de año. "Queremos que el aeropuerto esté en marcha lo antes posible con un modelo económico realista y lo menos costoso", ha apuntado Císcar.

Con esta decisión, el Consell renuncia a obtener beneficio económico en los próximos 20 años y defiende el "beneficio público de que esté abierto". "La Generalitat no pierde dinero. La apertura se tendría que pagar con dinero público. La explotación directa iba a costar a la Generalitat más de lo que costará la externalización", ha insistido Císcar.