El Ayuntamiento de Castelló continuará el próximo año con un escaso margen de movimiento acuciado por el plan de ajuste y el recorte de un 38 % de la inversión de la Generalitat. El gobierno local ha puesto fin al desfase de los últimos años y ha previsto este año un ahorro de 300.000 euros, pero mantiene una deuda financiera que iguala, con 157 millones, el montante del presupuesto de 2014. Así, la austeridad proseguirá, la inversión estará bajo mínimos y las contratas públicas, el gasto en personal y la amortización de deuda coparán el 75 % del presupuesto municipal de 2014.
El equipo de gobierno facilitó ayer a los grupos de la oposición el proyecto de presupuesto tras haber desgranado sus principales parámetros a los medios de comunicación en las últimas semanas. Las cuentas serán aprobadas en el pleno de este mes y entrarán en vigor el 1 de enero. El gasto ascenderá a los 157 millones de euros, lo que supone seis millones de euros menos (-4 %) respecto a 2013. Los munícipes populares han recortado en un millón de euros el importe inicial que se había anunciado por el imprevisto ajuste en la financiación de la Generalitat en la obra de Gaetà Huguet. Al respecto, el Consell rebajará un 38 % su aportación global en 2014 ( de 4,8 millones a 3,1), mientras el Gobierno destinará una cantidad similar a la de este año con 36 millones de euros.
Aunque el ayuntamiento reactivará en 2014 las inversiones con fondos propios con una partida de 2,1 millones, el capítulo de inversiones reales caerá un 50 % y descenderá de los 13 millones de 2013 a los 6,5 millones de 2014. El ejecutivo local asume para el Gaetà Huguet la partida de 900.000 euros prevista en el presupuesto autonómico frente a los 2,3 millones demandados. Como grandes proyectos, los presupuestos sólo recogen la citada reforma de la pista de atletismo, y dos millones de euros para la rehabilitación de la exsede de Hacienda de Huerto Sogueros, que también serán inyectados por el Gobierno valenciano. Aparte, se reservan 600.000 euros para obras de mantenimientos en unos recuperados presupuestos participativos, además de una partida de 200.000 euros para la remodelación de la fábrica Dávalos. Esta última consignación se repite desde hace años y todo hace indicar que se quedará nuevamente sin ejecutar, dado que se vincula al Consell y a la venta de suelo público.
El ayuntamiento mantendrá el gasto en servicios públicos, que bajará un 2 %, y en personal, que se reducirá un 0, 61 %. Las partidas de personal, con 49, 8 millones, y la de bienes corrientes, con 66 millones, coparán buena parte del presupuesto de 2014. El gasto de las contratas públicas -agua, luz y recogida de basura- supondrá 46 millones de los 66 de bienes corrientes. Por su parte, el pago de la deuda rondará los 23 millones, con lo que la suma del presupuesto de personal, concesiones públicas y las amortizaciones se comerá buen parte del presupuesto.
Por último, el consistorio reiterará la misma partida de 1,8 millones en emergencia social y suavizará la carga fiscal.
"Castelló está intervenido"
La portavoz socialista de Castelló, Amparo Marco, consideró que el presupuesto municipal "no ayudará a anticipar la salida de la crisis" y afirmó que Bataller "está atado de pies y manos por el plan de ajuste al que le ha llevado la gestión errática del PP". "El ayuntamiento está intervenido por el Estado y tutelado por la Generalitat. Es un presupuesto de supervivencia que no permitirá crear empleo", sostuvo Marco.
