La red de centros idiomáticos que ultima el Ayuntamiento de Castelló empezará a funcionar en un edificio autonómico en 2014 y consistirá en cursos de español en verano, según avanzaron ayer fuentes municipales. Uno de los espacios que apunta con más fuerza para este cometido es el Centro de Turismo del Grau de Castelló.

Las clases estivales en un inmueble existente reemplazarán al megaproyecto lingüístico que en 2005 idearon el entonces presidente del Consell, Francisco Camps, y el exalcalde, José Luis Gimeno, en una parcela de 425.000 cuadrados ubicada en el aeródromo del Grau. La antigua propuesta ha perdido el nombre de Ciudad de las Lenguas y no sólo ha sido suspendida por tiempo indefinido, sino que cuando se retome comprenderá una oferta turístico-residencial totalmente diferente del proyecto de aprendizaje del español inicialmente diseñado.

El alcalde quiere arrancar esta iniciativa en julio de 2014 y negociará convenios con academias especializadas y con instituciones académicas de países extranjeros para asegurar la llegada de visitantes. El emplazamiento todavía está por determinar, pero ayer desde el ejecutivo local aseguraron que el local forma parte del patrimonio inmobiliario que la Generalitat dispone en Castelló o el Grau, aunque eludieron concretar la ubicación. Los cursos se realizarán en verano, con lo que todo hace indicar que el lugar escogido se encontrará en un punto turístico de la ciudad como el Grau. Y un edificio del Consell que reúne las características para acoger el proyecto es el CdT de Castelló.

No obstante, el contenido de esta iniciativa navega en un mar de incertidumbre y, además, se desconoce si el ayuntamiento firmarán un acuerdo de colaboración con la Universitat Jaume I, que se ha adelantado y ha lanzado sus propia oferta de enseñanza de español para estudiantes extranjeros.

La oferta municipal se compaginará con la de las academias privadas y la Universitat Jaume I y contará, según las mismas fuentes, con un sello acreditativo de una entidad académica. El alcalde ha mantenido en el último año contactos con el Instituto Cervantes y con autoridades de la ciudad japonesa de UBE, pero la futura oferta educativa todavía se encuentra en ciernes.

El objetivo del consistorio, reiteraron desde el equipo de gobierno, es convertir a la capital de la Plana en un polo del turismo idiomático. Hace ocho años se pensó en la mastodóntica Ciudad de las Lenguas, pero tras ocho años de gestiones infructuosas, el ayuntamiento ha optado por tirar adelante una alternativa viable desde el punto de vista económico.