El Defensor del Profesor de la Comunitat Valenciana atendió en el curso 2012-2013 cerca de 500 denuncias de docentes y concluye en su informe anual que los recortes aplicados por el Gobierno y la Generalitat están generando un daño sin precedentes a la convivencia en las aulas, según informó ayer el sindicato ANPE.
El Defensor del Profesor es un servicio de atención inmediata y gratuita para docentes víctimas de situaciones de conflictividad y violencia en las aulas, puesto en marcha por ANPE en 2005, como primera medida de apoyo ante la indefensión del profesorado y como llamada de atención sobre el problema de la violencia escolar. Es un servicio abierto a todo el profesorado sin distinciones.
El 62 % de las llamadas recibidas por el Defensor del Profesor en el curso 2012/2013 corresponden a profesorado de primaria; el 24 % a educación secundaria; el 3 % a educación infantil; el 8 % a ciclos formativos; y un 3 % al resto de enseñanzas.
Para ANPE, resulta significativo y preocupante el aumento de los casos en los maestros de primaria. Consideramos que este alarmante dato alude claramente a la incidencia de los recortes en los programas educativos de apoyo y de compensación, así como a la disminución de profesores y el aumento de las ratios. Tal como ANPE ha venido advirtiendo, el informe del Defensor del Profesor concluye que los recortes en educación «han estancado los avances en la mejora de la convivencia en las aulas» y están generando un daño que afecta a la motivación del profesorado y que también pone en riesgo al alumnado, además de aumentar las posibilidades de fracaso escolar.
En apenas 2 años, el porcentaje de profesores que dicen querer abandonar la profesión ante la presión ha pasado del 4 % al 8 %, lo cual para ANPE «expresa claramente la desmotivación que en buena parte achacamos a los recortes y el aumento de ratio.
