El Consell de Alberto Fabra ejecutó por sorpresa y al filo de la pasada medianoche el apagón de las emisiones de RTVV. El cierre comenzó por Ràdio 9, mientras los trabajadores acudían en masa a las instalaciones de la radio y la televisión en un intento desesperado por mantener viva la empresa. En una franja de menos de diez minutos cayó la emisión de la radio autonómica primero en Valencia y luego en Alicante y Castelló. La jefa de Programación y Gestión de la Emisión, Manu Ríos, dimitió en la tarde de ayer para evitar la responsabilidad de la desconexión. El cese de la emisión de la TVV estaba previsto para esta madrugada.
Ràdio 9 pudo seguirse oyendo a través de internet y también funcionó la segunda emisora del grupo, Si Radio. El corte se ejecutó a través de los repetidores de Torrent, Alicante y el Desierto de Las Palmas que gestiona la empresa privada Abertis, que supuestamente recibió la orden del Consell de eliminar la frecuencias. A través de estos repetidores se distribuía la señal de Ràdio 9. En cambio, la de Si Radio opera a través de equipos propios de la empresa pública.
En el momento del apagón de la radio, en antena estaba el programa deportivo de Manolo Montalt, que a través de internet hizo continuas referencias a lo que estaba sucediendo con la señal.
Miembros del comité de empresa y trabajadores de la emisora se desplazaron de madrugada a la sede de esta en la avenida Blasco Ibáñez de Valencia. No pudieron acceder. Guardias de seguridad impedían el acceso, al igual que ocurría en el centro de programas de la televisión en Burjassot, donde las tarjetas de acceso del personal era requisadas. Al cierre de esta edición, era previsible la desconexión de la televisión en cualquier momento.
La drástica decisión del Ejecutivo del PP vino precedida de un acuerdo publicado aún en la noche de ayer en el Diari Oficial (DOCV), firmado por el vicepresidente, José Císcar, en el que se «autoriza» el cese de las emisiones a partir del día de su publicación.
El presidente del comité de empresa, Vicent Mifsud, acusó a Fabra de convertir la Comunitat Valenciana en «la Grecia de España».
Por otra parte, el líder de los socialistas, Ximo Puig, comparó la noche con otras trágicas en la historia reciente. «Es la más parecida a la del 23F», dijo. Ignacio Blanco (EU) censuró que se ha liquidado RTVV «de una forma intolerable, con nocturnidad y con la policía». Enric Morera (Compromís) dijo que el pueblo valenciano «no se merece esto».
