El alcalde de Castelló, Alfonso Bataller, destacó ayer que el ayuntamiento ha ahorrado más de 3,2 millones de euros con la reducción de la burocracia municipal a través de la interoperabilidad que ha propiciado la colaboración entre administraciones y la reducción de la burocracia municipal. «Con la puesta en marcha de esta propuesta, hace ya más de dos años, conseguimos un ahorro en los costes de tramitación para los ciudadanos, empresas y para el propio consistorio», aseguró.

De esta forma, tal como detallada el propio primer edil, «gracias a la simplificación de los trámites burocráticos que tienen que realizar tanto vecinos como empresas, es posible que estos no tengan que aportar documentación que ya esté en manos del Ayuntamiento de Castelló, lo que propicia una reducción de las cargas administrativas». Así, esta medida propicia el ahorro de más de 3,2 millones de euros porque los vecinos ya no tienen que entregar los documentos que ya han hecho llegar al consistorio en alguna otra ocasión.

«Ponemos la modernización y las nuevas tecnologías al servicio del ciudadano y a la mejora del servicio municipal», explicó Bataller, quien también dijo que este proyecto de interoperabilidad ha evitado presentar al consistorio más de 109.000 documentos para diferentes trámites y solicitudes, haciendo «más fácil y ágil dichas acciones administrativas».

Bataller destacó que el proyecto pone de manifiesto la apuesta del equipo de gobierno por la eficiencia que está desarrollando el consistorio con el fin de reducir costes y de que los vecinos se beneficien de esta acción.