El alcalde de Vall d'Alba y expresidente de la Diputación de Castelló, Francisco Martínez, será juzgado por delitos de corrupción vinculados al escándalo de la depuradora de Borriol. El juzgado instructor ha dictado auto de apertura de juicio oral contra él y otra seis personas (entre ellas, el exalcalde de Borriol Adelino Santamaría) a las que se atribuyen dos delitos continuados de prevaricación, cuatro de tráfico de influencias, siete de fraude ilegal y uno de negociaciones prohibidas. Martínez -mano derecha de Carlos Fabra durante años- agotará el mandato en Vall d'Alba, municipio del que es alcalde desde hace 24 años. Lo hará sin afiliación política, ya que ha tenido que darse de baja del PP. El presidente provincial, Javier Moliner, alegó ayer que no hay margen de maniobra para forzar la marcha de Martínez antes de las elecciones.

Una vez decretada la apertura de juicio oral, el siguiente paso es la fijación de un plazo para que las partes presenten sus respectivos escritos de acusación y defensa, según informó el Tribunal Superior de Justicia valenciano. El caso se juzgará en la Audiencia Provincial, en una fecha por determinar, ya que los delitos que se imputan llevan aparejados penas superiores a cinco años.Con Martínez y Santamaría, se sentarán en el banquillo los dos hijos del primero; el empresario Raúl Babiloni (socio y amigo de Martínez) y su empleado Luis García Campillo; y el técnico de la diputación Ignacio Sangüesa.

La apertura de juicio oral obligó a Martínez a pedir la baja en el PP, como le ocurrió en su día a Carlos Fabra. En una escueta nota remitida desde el ayuntamiento comunicó su cese «voluntario» como afiliado «con carácter temporal hasta que se resuelvan de manera favorable los asuntos judiciales que tengo pendientes, y de los que reitero mi absoluta inocencia». «Con esta decisión, al igual que con otras adoptadas en los últimos meses por los mismos motivos, pretendo diferenciar y separar mis asuntos privados de mi gestión pública y, sobre todo, no dañar al Partido Popular, para el que volveré a trabajar con la misma ilusión de los últimos 30 años una vez que quede acreditada mi inocencia», manifestó.

Sin embargo, seguirá como alcalde de Vall d'Alba hasta la constitución del próximo ayuntamiento.En declaraciones a este diario, Martínez justificó que no renuncia porque el caso de la depuradora de Borriol «no afecta a la Alcaldía» de Vall d'Alba, informa Álvaro Sales.

El presidente provincial del PP, Javier Moliner, explicó que no hay margen para forzar el relevo. «A partir de ahora la alcaldía de Vall d'Alba pasará a ocuparla un no militante del PP», señaló Moliner, quien detalló que «estamos en periodo de convocatoria electoral ya planteada, por lo tanto en un periodo en que no cabe ningún tipo de acción de cambio de gobierno en los ayuntamientos, y es público y notorio que Martínez no concurrirá en la candidatura del PP en Vall d'Alba».

El mandatario provincial afirmó que Martínez permanecerá como alcalde hasta la constitución del nuevo gobierno, «puesto que en este momento no cabe ninguna otra figura legalmente y, aunque él dimitiera, que es una decisión suya, ni siquiera cabría la opción de un cambio de alcalde, por lo tanto no cabe ninguna solución de ese tipo». «Pero lo que es evidente es que deja de tener la condición de militante del partido y lo más importante es que no va estar en la lista del PP en las próximas elecciones», sentenció.