El Castellón roza el campeonato con la yema de los dedos. Ayer, asido a la habitual solvencia que exhibe en los últimos tiempos, venció por la mínima en el campo del Atlético Saguntino, gracias a un solitario tanto de Negredo en el minuto 75. La victoria albinegra se unió a la derrota del Atlético Levante en el feudo del Ribarroja. El resultado: a tres jornadas del final de la Liga regular, el Castellón es líder con cinco puntos de ventaja. Puede ser campeón esta misma semana. Si gana al descendido Utiel en Castalia y el Atlético Levante pincha con el Torre Levante en su partido, el Castellón asegurará la primera plaza.

Ayer, en Sagunto, en un campo repleto de albinegros, el Castellón desplegó un manual de eficiencia. No fue un partido brillante ni vistoso, pero sí fue el equipo albinegro lo que había pedido su técnico en la previa. Fue práctico. Sumó su quinta jornada sin encajar gol. Le valió para sumar su quinta victoria consecutiva.

Ante la baja de Rubén Suárez, el entrenador albinegro Ramón María Calderé decidió recuperar la doble punta. Yagüe acompañó a Negredo en el ataque, en un once titular al que volvió Guille Vázquez al eje de la zaga, desplazando a Juanra al lateral derecho y a Adrià Gallego a la grada. El plan se trastocó pronto. A los cinco minutos el central Javi Selvas sufrió una lesión muscular y abandonó el campo. Juanra se reubicó como central y entró Borja Gracia para jugar contra su exequipo como lateral derecho, compartiendo banda con Dani Pujol. En el medio, Calderé repitió el esquema decisivo en Cullera: Castells junto a Canadell en el medio con Meseguer a banda muerta en la izquierda.

Con estos mimbres, el Castellón no pasó apuros, pero tampoco fue capaz de generar claras ocasiones de gol. Llegó a posiciones de ataque con relativa frecuencia, pero dio la puntada definitiva. Algo similar le ocurrió al Atlético Saguntino, que se apoyó en el trabajo de Da Silva en punta, pero tampoco exigió de veras al arquero Álvaro.

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El segundo acto transcurrió con una tónica similar, al menos hasta que los entrenadores movieron los banquillos. Tanto Frank Castelló como Ramón María Calderé fueron a por el partido. El Saguntino introdujo al ariete Oliva. El Castellón agitó el avispero con Pruden y Víctor Pino. Con el partido en el aire, llegó la acción clave. En el minuto 75, una maniobra del lateral Pablo Suárez la culminó Negredo rematando a la red. Un gol que vale medio campeonato, porque de ahí al final el Castellón cerró el encuentro tirando de oficio. Mantuvo el 0-1 hasta el final y dio un paso de gigante en el camino hacia su objetivo del ascenso.