Está previsto que hoy mismo finalicen los trabajos interiores en los antiguos juzgados de Vila-real previos al derribo del edificio, tal y como confirmó ayer el edil de Territorio, Emilio Obiol. Así pues, estas tareas iniciales ya han dejado preparadas las viejas dependencias judiciales para su completo derribo que, según el calendario municipal, se acometerá a mediados del próximo mes de junio. Los trabajos han consistido fundamentalmente en desmantelar la tabiquería interna y secundaria del edificio y en desmontar todos los sistemas eléctricos, aunque también se han retirado algunas piezas de la fachada. Los escombros se encuentran dentro del edificio y no serán retirados ya que «a partir de junio se derrumbará todo y no tendría sentido hacerlo ahora», indicó Obiol. El alcalde de Vila-real, José Benlloch, tildó de «acierto» el haber demorado hasta el verano el inicio del grueso de los trabajos, tal y como reclamaron los vecinos y comerciantes de la zona centro. Asimismo, señaló que «no se ha cometido ni una distorsión», apuntó. En este sentido, añadió que la adjudicataria de la obra, la empresa castellonense ADC, «ha tenido mucha sensibilidad ya que retiró las vallas y el material de fuera para Semana Santa».