El desarrollo de «un resort hotelero» en el aeródromo del Grau, tal como pretende el alcalde de Castelló, Alfonso Bataller, choca con la situación actual de los terrenos. La justicia ha paralizado cautelarmente la recuperación de la superficie por parte del ayuntamiento, mientras la anulación del Plan General de Ordenación Urbana frena cualquier reclasificación de suelo. El proyecto turístico ha de superar estas dificultades antes de poder ser una realidad y su ejecución se mantiene sin fecha.
Como muestra de la parálisis de la citada propuesta turística, el ejecutivo local ha rectificado y ahora permite al aeroclub impulsar hangares desmontables. Hace un año vetó una solicitud esgrimiendo la futurible actuación de ocio. Entonces, incluso, envió a la Policía Local a comprobar la legalidad de los hangares existentes, y presentó una denuncia por la vía penal al considerar que su construcción era reciente, un hecho que cuestionaba, sostuvo, la reversión municipal de la parcela de 425.000 metros cuadrados. El aeroclub respondió que los terrenos seguían siendo de su titularidad por una resolución del contencioso, que había aceptado tirar atrás cautelarmente la decisión municipal mientras se dirime el pleito. Además, aseguró que las construcciones eran antiguas y databan de hace 60 años.
A primeros de este año, según fuentes del Aeroclub, el ejecutivo local asumió los efectos del pleito judicial y aceptó la suspensión de la reversión de los terrenos del aeródromo. En este tiempo ha trasladado al aeroclub la posibilidad de levantar hangares desmontables con condiciones, según las mismas fuentes. Como remate, la fiscalía acaba de archivar unas diligencias penales que había iniciado a instancias del ejecutivo local porque, afirma, «los hechos denunciados no son constitutivos de delito por encontrarse la parcela en suelo urbanizable dotacional, Aeroclub, por lo que la construcción -de hangares- sería autorizable».
Estas circunstancias judiciales frenan los anhelos del ayuntamiento de convertir esta zona en un nuevo punto turístico. El alcalde, Alfonso Bataller, apostó recientemente en una conferencia en el Real Casino Antiguo, por transformar el aeródromo en un «complejo turístico, estilo resorts».
Fuentes municipales admiten que este proyecto todavía se encuentra muy verde. Afirman que se han de recuperar los terrenos y reiteran que hasta que no se licite el proyecto de ocio, el aeroclub podrá permanecer en la que ha sido su ubicación en las últimas cinco décadas. De hecho, el PP obvia en su programa electoral la actuación del aeródromo.
