Las averías en el servicio de radioterapia del Hospital Provincial no cesan. La última se registró ayer por la tarde, inutilizando uno de los dos equipos, que no entrará en servicio hasta el lunes al mediodía. Una incidencia que vuelve a afectar a pacientes oncológicos que tenían programadas sesiones de radioterapia. En esta ocasión, el acelerador lineal averiado es el número 2, el más nuevo. El que queda operativo, el 1, es más limitado y no puede realizar determinados tratamientos.
Mientras tanto, el hospital sigue a la espera del nuevo acelerador que suplirá a uno de los actuales. El anterior conseller de Sanidad, Manuel Llombart, dejó el puesto sin cumplir el compromiso de compra de la máquina, valorada en 3 millones de euros. Tampoco el presidente de la diputación, Javier Moliner, que publicitó la adquisición del equipo poco antes de las elecciones. La compra no se ha tramitado y se corre el riesgo de que el hospital se quede con un solo acelerador dentro de un año, cuando caduca uno de los dos actuales.
