Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El placer de la carne y el embutido a la brasa

El Mesón Navarro es uno de los locales más longevos de Castelló El bocadillo estrella es el blanco y negro a la brasa acompañado de una ensalada clásica

El Mesón Navarro consigue reunir en su local a todo tipo de clientes. àngel sánchez

El Mesón Navarro es uno de los locales con más historia de Castelló. El 1979 se abrió el primer local y, actualmente, tienen tres establecimientos repartidos por la ciudad. Levante de Castelló visita el Mesón Navarro II, el ubicado en la calle Amadeo I número 8 donde a la hora del almuerzo se citan obreros, jubilados, empresarios y comerciales. Un amplio abanico de clientes que comparten un denominador común: la pasión por el embutido y la carne a la brasa.

Es la especialidad de la casa. Desde las 8.30 horas hasta las 00.00 el fuego se mantiene vivo y Pedro, el brasero, no cesa en poner parrilla tras parrilla. El bocadillo de longaniza y morcilla es uno de los más demandados y, junto a una sencilla pero sabrosa ensalada valenciana (lechuga, tomate, cebolla y olivas), se convierte en el almuerzo estrella. La cerveza y el carajillo de ron quemado completan una de las comidas con más arraigo en el terreno.

Además, Mesón Navarro también cuenta con una amplia carta de bocadillos y tapas tradicionales: jamón con tomate, tortillas, sardina de bota, bacalao, ensaladilla, bravas y montaditos, entre otras exquisiteces. El fundador del bar, José Navarro, trabajó varios años en Barcelona y recuerda que, cuando regresó a Castelló, fue de los primeros en implantar el pan con tomate. «Cuando empezamos a ofrecerlo parecía algo extraño y ahora es de lo más común», asegura. Además de una excelente materia prima y un acogedor local, Mesón Navarro está compuesto por un gran equipo de profesionales, tanto en la cocina como en el servicio que hacen de este establecimiento uno de los más amenos donde «matar el cuc».

Compartir el artículo

stats